Según la entidad agrícola, los planes del Departamento de Agricultura pondrían en peligro la continuidad de más de 300.000 hectáreas y de 4.900 productores, así como de sus correspondientes cooperativas.
Según ha informado la FCAC en un comunicado, las comarcas de zonas desfavorecidas y de montaña más afectadas por esta decisión serían las Garrigues, la Terra Alta, el Segrià, Ribera d’Ebre, el Pallars Jussà, el Pallars Sobirà, el Ripollès, el Solsonès, el Alt Urgell, el Berguedà, Osona y la Noguera, entre otras.
Las zonas de montaña dejarían de percibir 9,2 millones de euros que se destinaban a unos 3.100 productores, mientras que las otras zonas desfavorecidas perderían los 2,2 millones de euros que llegaban a unos 1.800 productores.
La situación puede ser mucho más grave en algunas comarcas
La situación se agravaría en determinadas comarcas -como las Garrigues, el Segrià y la Terra Alta-, donde los productores de fruta seca todavía no han cobrado las ayudas específicas que se destinan al sector.
Precisamente, según la federación, estas son las zonas con un riesgo de abandono agrario más elevado y en las cuales, a menudo, las ayudas de la PAC son más bajas.
La FCAC ya denunció que, el año pasado, el Ministerio y el Departamento de Agricultura habían reducido las ayudas específicas a la fruta seca más de un 65%, bajándolas a 32 euros por hectárea, pero ni siquiera ese importe aprobado se ha hecho efectivo a día de hoy y por ello es imprescindible que los pagos de estas ayudas pendientes se hagan efectivos de forma inminente. EFEAGRO