ASAJA de Ciudad Real exige de manera urgente a las Administraciones públicas competentes la adopción de medidas inmediatas ante la detección de nuevos casos de lengua azul en explotaciones ganaderas de la provincia que está poniendo al sector en una situación límite.
Desde la organización se alerta del grave perjuicio económico y sanitario que esta enfermedad está ocasionando al sector, especialmente entre las explotaciones de ovino y bovino. “Se trata de una gravísima enfermedad que está afectando a numerosas explotaciones ganaderas de nuestra provincia”, explica Pedro Barato, presidente nacional de ASAJA.
Los ganaderos se encuentran en una situación límite, tras meses de dificultades por la sequía, el encarecimiento de los costes de producción y ahora, la amenaza de esta enfermedad que puede provocar importantes pérdidas en las cabañas ganaderas. “No podemos permitir que las Administraciones públicas se encuentren de vacaciones sin ofrecer soluciones a esta grave situación. Echamos en falta su compromiso a la hora de dar la suficiente información para que el ganadero pueda tomar las medidas correctas”, detalla Barato.
ASAJA reclama una intervención urgente y coordinada, que incluya: la distribución inmediata de vacunas en las zonas afectadas. “Se necesitan medicamentos y medidas de choque a la máxima brevedad posible”, exige Pedro Barato. También, la puesta en marcha de ayudas directas para las explotaciones que hayan sufrido bajas o pérdidas productivas, la agilización de los trámites administrativos para declarar oficialmente las zonas afectadas y permitir la movilidad del ganado con garantías; y por supuesto, una campaña informativa para orientar a los ganaderos sobre las medidas de prevención y contención del brote.
