El reglamento autonómico aprobado recientemente reconoce como principio básico la caza como actividad social y económica, para dar cobertura a esta actividad cuando va asociada a la cultura y el ocio, sumando complementos al desarrollo rural.
Cortés consideró que este decreto dará "identidad" a las sociedades de cazadores extremeñas y les permitirá una mayor capacidad de gestión, así como un incremento en el fomento del asociacionismo en la comunidad.
El reglamento indica que cada municipio podrá tener una sociedad de cazadores; o dos siempre que exista como mínimo 100 socios y 50 hectáreas por socio; aunque manifestó que en la comunidad no hay término municipal con tanto terreno para que se dé esta circunstancia.
Satisfacción por la clasificación de los terrenos
Cortés también mostró su "satisfacción" porque el reglamento establezca la clasificación de los terrenos, la señalización, los terrenos cinegéticos bajo gestión pública, los cotos de caza, las zonas de caza limitadas, y otras entidades colaboradoras.
Recordó que esta normativa era una de las "asignaturas pendientes" que había en el sector a nivel nacional, y se ha felicitado porque haya sido la comunidad de Extremadura -aunque se lleve reivindicando desde hace mucho tiempo- quien haya dado el paso.
Serafín Cortés cifró en unas 700 las sociedades de cazadores existentes en la actualidad en la comunidad autónoma extremeña.