La Guardia Civil investiga la muerte de un hombre por un golpe de calor mientras trabajaba el pasado viernes en la recogida de fruta en la comarca del Bajo Cinca, en Huesca. Fuentes de la Guardia Civil han precisado que la víctima, un temporero paquistaní, carecía de contrato de trabajo y residencia.
Según ha podido saber RTVE.es, los compañeros del fallecido lo trasladaron hasta un centro de salud en estado muy grave. No obstante, no pudieron hacer nada por salvar su vida.
El viernes 20 de junio la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activó el aviso naranja por altas temperaturas en el sur de Huesca, concerniendo así a la comarca del Bajo Cinca. Ese día se registraron en Fraga máximas de hasta 39 grados, después de varias jornadas consecutivas de calor sofocante. En la mayor parte de la comunidad estaba activado el aviso amarillo por la ola de calor.
CC. OO. y UGT han exigido medidas para evitar estas tragedias en el campo, mientra que la organización agraria UAGA-COAG admite su preocupación no solo por esta muerte, de un trabajador que carecía de contrato de trabajo y residencia, sino por la realidad que se vivie en el campo aragonés destapada por las 3 operaciones de la Guardia Civil contra la explotación en los dos últimos meses.
Por su parte, Izquierda Unida (IU) de Aragón ha expresado su profundo dolor y condena por la muerte del temporero. El coordinador general del partido en Aragón, Álvaro Sanz, ha afirmado que «lo ocurrido en Fraga no puede tratarse como un accidente: es un caso de explotación laboral que acaba en tragedia y que bien podríamos llamar asesinato. Todo el peso de la ley debe caer sobre los responsables».
