Hace ya casi dos meses cuando comenzaban las primeras operaciones de naranja para zumo en esta campaña, ASAJA Andalucía denunciaba, junto a Asaja Alicante, el abuso de posición dominante que ejercen las industrias cítricas destinadas a la producción de zumo, con ofertas de compra con precios muy por debajo de los de mercado y que podían incurrir en incumplimientos de la Ley de la Cadena Alimentaria, al no cubrir siquiera los costes de producción del agricultor.
Hoy en día las cotizaciones del zumo en origen en España vuelven a estar en los mismos niveles que hace dos meses, ya que han ido descendiendo desde finales del mes de diciembre, «por lo que se hace necesario retomar esta denuncia, máxime cuando seguimos viendo cómo en los últimos años el precio del zumo de naranja en los mercados de futuros se encuentras en sus máximos históricos, más del doble que hace dos años en estas mismas fechas, una evolución al alza que actualmente sigue sin verse reflejado en el precio en origen», según denuncian ambas organizaciones agrarias.
Las cotizaciones actuales «en muchos casos se encuentran por debajo de los costes de producción, y muy por debajo de los precios del mercado internacional, en el que hay una elevada demanda de zumo de naranja y una oferta más bien corta, derivada sobre todo de las bajas producciones de Brasil, el principal productor mundial como consecuencia de la sequía y las enfermedades que han afectado también al resto de los principales países productores de este cítrico», destaca ambas ASAJA.
Por ello, el presidente de ASAJA-Andalucía, Ricardo Serra, vuelve a instar a la AICA y al Ministerio de Agricultura a intervenir ante situaciones abusivas como esta: “Hay que proteger al productor, y no solo por ser el eslabón más débil de la cadena sino también y especialmente porque sin él, sin el agricultor y sin la producción en el campo, todo lo demás se cae. Y para que el agricultor siga en el campo, las producciones tienen que ser rentables”.
Además de ello, ASAJA exige una vez más a las Administraciones que vigilen la entrada de naranjas de terceros países en los que no se producen en las mismas condiciones que en la UE, lo que implica que sus costes de producción son muchos más bajos que en España y no cumplen los estándares que se exigen a nuestros productores, en cuanto al uso de fitosanitarios y otras exigencias medioambientales, entre otros agravios comparativos.
Por último conviene recordar que, en la pasada campaña, los precios fueron competitivos en la primera parte de la campaña, pero a partir de febrero se hundieron de manera sorpresiva debido a la entrada de naranja de fuera de la Unión Europea, fundamentalmente de Egipto. Ha habido un aumento de las exportaciones de países terceros “sin reciprocidad alguna por parte de la Unión Europea en materia laboral y sanitaria”.