La 29ª Cumbre del Clima afronta estos días su recta final. Un año más, la cita vuelve a celebrarse en un país eminentemente petrolífero, Azerbaiyán, tras las polémicas cumbres de Egipto y Dubái. Y un año más, las grandes potencias contaminantes vuelven a despreciar, o directamente torpedear, los objetivos de estas cumbres.Ante esta situación, los agricultores y ganaderos recuerdan que la agricultura y ganadería familiar es el modelo más vulnerable ante los efectos de la crisis climática. «Es imprescindible que los países inviertan fondos para proteger lo más vulnerable y estratégico: sus productores de alimentos», aseguran.
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha alzado su voz para reclamar la creación de un fondo financiero específico y potente que fomente acciones de apoyo a la agricultura y ganadería familiar, tanto en las estrategias de mitigación del cambio climático como de adaptación en todo el mundo
La COP 29 está poniendo su foco en el aspecto de la financiación necesaria para afrontar los retos de la crisis climática. UPA cree que los fondos destinados a este reto global deberían multiplicarse al menos por diez, especialmente el dinero que los países ricos deben aportar a los menos desarrollados para ayudarles a adaptarse al cambio climático y a mitigar sus emisiones.
OBJETIVO: FAVORECER LA AGRICULTURA FAMILIAR
UPA pide a los delegados en la COP que trabajen por el fortalecimiento de la Agricultura Familiar ante el cambio climático, implantando sistemas de identificación de vulnerabilidades, sensibilidad y soluciones a los riesgos climáticos.
“Los países deben promover planes de acción y medidas de mitigación y adaptación al cambio climático a través de la agricultura y la ganadería”, aseguran desde UPA, así como un mecanismo de certificación de las absorciones de carbono por parte del sector agrario, con un riguroso control público y con el objetivo de lograr una agricultura lo más descarbonizada posible.
“La Agricultura Familiar es muy vulnerable ante el cambio climático. Necesitamos soluciones urgentes. Estamos hartos de declaraciones ambiguas y no vinculantes de tantas fallidas Cumbres del Clima”, afirman desde la organización agraria. “La crisis climática pone en juego el futuro de la agricultura, de la alimentación, y de todo el planeta”.
LOS EFECTOS DE LA CRISIS CLIMÁTICA EN LA AGRICULTURA
UPA destaca que, como demuestran los datos y certifica la ciencia, el clima está cambiando de manera vertiginosa, provocando pérdidas en forma de vidas humanas, así como miles de millones de euros en pérdidas económicas. “El cambio climático mata”, creen en UPA.
Los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más intensos y frecuentes, según UPA. “Desde el sector agrario lo sufrimos en todos los sectores y territorios con una virulencia nunca vista: sequías, inundaciones, incendios forestales… Esto pone en peligro no sólo la rentabilidad sino incluso la viabilidad de la actividad agrícola y ganadera en numerosos casos”.
NEGACIONISMO DAÑINO
UPA cree que el negacionismo del cambio climático supone un” gran peligro” para la sociedad y la agricultura. La organización agraria defiende que el cambio climático exige medidas urgentes de adaptación y de mitigación y por ello hemos defendido todos los instrumentos y herramientas que tengan por objeto esa lucha, ya sean en el seno de la Agenda 2030 (con su ODS 13 “Acción por el clima”), el plan nacional de adaptación al cambio climático (PNACC), el plan integrado de energía y clima (PNIEC), la Ley de cambio climático, o las medidas incluidas en el Pacto Verde Europeo.
A pesar del escepticismo imperante y del complejísimo contexto geopolítico, UPA pone sus esperanzas, una vez más, en que esta cumbre concluya con resultados ambiciosos y positivos, con un acuerdo en el que las partes se comprometan a establecer planes nacionales ante el cambio climático ambiciosos que favorezcan la acción y la financiación para reducir las emisiones, adaptarse al cambio climático y apoyar ante las pérdidas y los daños causados, como lamentablemente acabamos de sufrir en nuestro país con la terrible DANA.