Los precios de cereales han cerrado el año 2023 en la tónica de 12 meses marcados por la tendencia bajista que, en el caso del trigo blando, se acercó al -28%, según han informado este martes a Efeagro fuentes de la patronal de comerciantes mayoristas Accoe en un balance del año que acaba de terminar. De cara a 2024, la vista sigue puesta en el Mar Negro porque el recrudecimiento del conflicto entre Rusia y Ucrania puede empujar a los precios como sucediera con el arranque de las hostilidades.

En porcentajes, le sigue la depreciación de la cebada en estas 52 semanas de 2023 (-27,21%); el maíz (-26,57%); la cebada malta (-23,48%); el trigo duro (-19,53%); y la avena perdió un 6,82 % a lo largo del año.

En precios, el trigo blando acabó 2023 en los 242,11 euros/tonelada; el maíz en los 235,30 euros/tonelada; la cebada (231,43 euros/tn); el trigo duro (367,50 euros/tn); cebada malta (251,25 euros/tn); y la avena en los 312,17 euros/tonelada.

EL MERCADO SIGUE CON LA VISTA PUESTA EN EL MAR NEGRO PORQUE EL RECRUDECIMIENTO DEL CONFLICTO ENTRE RUSIA Y UCRANIA PUEDE EMPUJAR A LOS PRECIOS

A pesar de ese retroceso en los 12 últimos meses y su tendencia bajista, la cotización de los cereales ha acabado su semana 52 en plano respecto a la semana previa, con apenas variaciones, como se ha podido ver en las diferentes lonjas españolas.

Se debe a las pocas operaciones, con tendencia a la baja, debido a las fiestas navideñas pero es un mercado que sigue con la vista puesta en el Mar Negro porque el recrudecimiento del conflicto entre Rusia y Ucrania puede empujar a los precios, especialmente del trigo, según las mismas fuentes.

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