Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos indica que uno de los principales compromisos del Gobierno de España para esta nueva legislatura, la Ley de Agricultura Familiar, debe favorecer «de forma única y exclusiva a los agricultores y ganaderos profesionales españoles y no a las familias dueñas de grandes empresas agrarias o a los fondos de inversión que han irrumpido y que cada vez mandan más en el sector».
La organización considera que se trata de una Ley «necesaria e imprescindible» para proteger a la agricultura familiar, pero mantiene su «escepticismo y cautela» hasta ver cómo se concreta la normativa de la medida estrella presentada por el presidente Pedro Sánchez en su discurso de investidura. «Puede ser una medida histórica que apoyamos si de verdad se desea apostar por ese modelo familiar que tiene un alto valor social, económico, territorial y medioambiental», asegura Unión de Uniones.
«ESPERAMOS QUE LA NUEVA LEY NO COMETA ESOS MISMOS ERRORES Y SIRVA PARA QUE LOS AGRICULTORES Y GANADEROS PROFESIONALES PUEDAN OBTENER LA PROTECCIÓN DESEADA”
Unión de Uniones recuerda que está en vigor la única referencia legal similar del sector como es la Ley 19/1995 de Modernización de Explotaciones Agrarias que marca como explotaciones prioritarias aquellas a cargo de agricultores y ganaderos profesionales y con una pequeña o mediana dimensión económica.
«Sin embargo, es difícil recordar una sola vez en la que el Gobierno haya sacado una ayuda estatal con mayores beneficios para este tipo de explotaciones», critican, subrayando que la organización lo ha pedido insistentemente, por ejemplo, para el plan Renove de maquinaria agrícola sin que haya habido una respuesta positiva al respecto.
«Esperamos que esta nueva Ley de Agricultura Familiar no cometa esos mismos errores y sirva para que los agricultores y ganaderos españoles profesionales puedan obtener la protección deseada y seguir con su actividad en el futuro», afirman desde la organización agraria.
Unión de Uniones anuncia que presentará a lo largo del próximo año sus observaciones y enmiendas a este proyecto legislativo y hará su trabajo en las Cortes, para intentar que la Ley favorezca a las explotaciones de agricultores y ganaderos profesionales en las políticas agrarias. «Eso de familiar es realmente muy confuso y no se puede meter en el mismo saco a los grupos familiares con grandes empresas en el sector y a los fondos de inversión con los pequeños y medianos agricultores y ganaderos».
Esperemos que esta nueva ley sea un autentico revulsivo para las explotaciones familiares y no pase sin pena ni gloria como ocurrió con la Ley 49/1981, de 24 de diciembre, del Estatuto de la explotación familiar agraria y de los agricultores jóvenes, que era una buena ley, pero que las rencillas entre las recién creadas CCAA dieron al traste con sus buenas intenciones.
Una ley que llevará consigo un nuevo chiringuito del que vivirán los que están alrededor de él,dándoles el bien va y siguiendo la corriente que les marquen para no enfadar al que les dé de comer.
Esa ley se tendría que llamar, ley para mantener la esclavitud familiar.
Hay cooperativas, cooperativas de segundo grado,sindicatos agrarios,
Unión de cooperativas a nivel regional y conforman otra a nivel nacional y seguro que me dejarè alguna organización más porque es imposible no dejarse algo.
Pues entre todos no son capaces simplemente de hacer cumplir la ley de cadena alimentaria,con eso bastaría, para que más leyes y chiringuitos que no solucionan nada.
Luis planas lo que tiene que hacer es soltar las ayudas a lo jóvenes agricultores que son los que tiran en estos momentos tan duros para adelante y del carro