Renovarse o morir o quizás lo importante es simplemente llamar la atención o diferenciarse del resto. Por eso, el sector agroalimentario innova con nombres cuanto menos sorprendentes. ‘Tetas de la Sacristana’ o ‘Croqueta y Presumida’ son algunas entre las marcas más curiosas de España. Entre las 100 marcas más llamativas registradas en el país, hay otras del sector agroalimentrario y de la restauración como ‘La Tapilla Sixtina de Madrid’, ‘Pipas pal pájaro’ o ‘Castigo Di-vino’.
EL SUBSECTOR DE LAS BEBIDAS ALCOHÓLICAS SE PRESTA A REGISTRAR MARCAS CON ESE TIPO DE PALABRAS QUE SUELEN HACER REFERENCIA A LAS “GÓNADAS MASCULINAS”
La empresa de “naming” Damenáme ha elaborado esta relación revisando el listado de las marcas más llamativas registradas en la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) en el que llaman la atención las marcas con palabras “malsonantes”, según un comunicado.
El sector agroalimentario y de la restauración y, especialmente, el subsector de las bebidas alcohólicas, no son una excepción y se prestan a registrar marcas con ese tipo de palabras que, además, suelen hacer referencia a las “gónadas masculinas”, como han expuesto desde esta compañía.
Además de las dos marcas previamente nombradas, en España hay registradas otras como: “Cabrón hispánico”, “Cagaprisas”, “Castigo Di-vino”, “Cojón de gato”, “Con 2 cojones”, “Di no a los tristes”, “El perro gamberro”, “Juan Félix, Garbanzos Ecojonudos”, “La carne x castigo” o “La tapilla Sixtina de Madrid”.
También caben destacar otros nombres cuanto menos sorprendentes, como “Licores Hijoputa”, “Matapaja”, “Minabo”, “Olé tus cojones”, “Pastas Luego”, “Pipas pal pájaro”, “Quitapenas” o “The Botellón”. Al parecer, todo vale para llamar la atención.