EFE.- Tras uno de los años más secos de los últimos 40 años (2012), las lluvias de los primeros días de abril y de marzo de 2013, el mes más lluvioso desde que en 1947 se contabilizan datos de precipitaciones, según la Agencia Estatal de Meteorología, han llenado los pantanos andaluces, algunos de los cuales, como el Guadalcacín, en Cádiz, ha desembalsado por primera vez desde que se construyó en 1993.
El desembalse de pantanos mantiene al límite del desbordamiento de ríos como el Guadalete a su paso por Jerez, donde la cota está hoy a 40 centímetros del desborde, o el Guadalquivir a su paso por Mogón o en Andújar (ambos de Jaén), donde se ha activado el plan de emergencia municipal y la situación está "al límite", según la Subdelegación del Gobierno.
En Badolatosa y en Utrera, en la provincia de Sevilla, varias viviendas han tenido que ser desalojadas por la crecida de los ríos, lo que ocurrió días atrás en Mogón, y además hay numerosas carreteras locales de la comunidad afectadas por el agua.
"No conduzca en áreas inundadas, abandone el automóvil y busque un terreno más alto cuando se vea rodeado por una corriente de agua, procure circular por carreteras principales y autopistas y tenga en cuenta las normas preventivas de su comunidad autónoma", recomienda Protección Civil a los conductores.
Respecto al campo, los agricultores ha afirmado que sufrirán importantes pérdidas económicas en sus cultivos de frutas, hortalizas y cereales por las lluvias torrenciales, las crecidas de los ríos y los desembalses de los pantanos por seguridad.
En Granada, la organización agraria UPA ha cifrado en 33,7 millones de euros las pérdidas sufridas por los productores de espárrago como consecuencia de las continuas lluvias del último mes, y la Coordinadora de Organizaciones Agrarias (COAG) en Jaén ha mostrado su preocupación por el estado del olivar en la provincia para la próxima campaña.
Los constantes temporales del suroeste que están afectando a Andalucía en marzo y abril han originado un aumento de agua salada y de sedimentos en zonas del litoral, como en Rota (Cádiz), donde aparecieron miles de peces muertos en la orilla.
Los temporales también han arrastrado hasta playas de Cádiz y de Huelva multitud de medusas tóxicas de la especie "Carabela Portuguesa", por lo que se han cerrado al baño.