La Asociación Empresarial de Fruta de Cataluña (Afrucat) ha denunciado que el mecanismo de la «excepción ibérica», que tiene por objetivo abaratar el coste de la luz, supone por el contrario para las compañías del sector un sobrecoste del 35%.
En concreto, Afrucat, que representa a unas 80 empresas, alerta de que en las facturas recibidas relativas al mes de julio consta el concepto «Ajuste Real Decreto 10/2022», que encarece de forma considerable el importe final a abonar.
El director general de Afrucat, Manel Simón, ha citado cuatro ejemplos en conversación telefónica con Efe: a unos 6.300 euros de consumo energético que debía pagar una firma se han sumado 3.900 por este ajuste; a 45.200 de otra se han añadido 25.100; a 4.413 se han sumado 1.986; y a 6.386 se han agregado 3.958.
En marzo pasado los Veintisiete concedieron a Madrid y Lisboa la llamada «excepción ibérica» por su escaso nivel de interconexión con el resto de la UE y su alta tasa de renovables.
Esto abrió la puerta para que ambas capitales negociaran con Bruselas un mecanismo temporal para limitar el contagio del gas en la factura de la luz.
El real decreto-ley que regula la excepción ibérica en España reza que son los consumidores -y no las comercializadoras de energía- quienes financiarán «las cantidades correspondientes a dicho ajuste», si bien añadía que estos importes resultarían «en cualquier caso en un precio final inferior al que se daría en ausencia de la medida».
Pero Simón afirma que esto no es así en el caso de las empresas de Afrucat, que ya habían cerrado en mayo y hasta el 31 de diciembre el precio a pagar por la electricidad consumida.
A estos importes, ya fijados y que según apunta no habrían variado de no aplicarse la excepción ibérica, debe ahora sumarse este «Ajuste Real Decreto 10/2022», que supone un encarecimiento aproximado del 35 % de la factura.
Afrucat cifra en hasta 675.000 euros mensuales el sobrecoste sufrido por las empresas que representa a causa de la excepción ibérica.