Según el ministro español, Miguel Arias Cañete, "el acuerdo sobre la reforma de la PAC recoge la práctica totalidad de los objetivos de negociación de España".
Por otra parte, en desarrollo rural se amplía en un año del periodo disponible por cada Estado miembro para ejecutar los gastos de las medidas de este ámbito, mediante la ampliación de la denominada regla N+2 a N+3, según ha apuntado el Ministerio.
El nuevo reglamento permite a los Estados miembros elaborar un programa nacional, compatible con programas regionales, y se podrán financiar así medidas de carácter supraautonómico.
Entre ellas, las relacionadas con cooperación, programas de lucha contra plagas y enfermedades, conservación de recursos fitogenéticos, prevención de incendios, restauración forestal, innovación y la formación, entre otros asuntos, según el Magrama.
Sobre los regadíos, el nuevo acuerdo reduce al 10 % el ahorro mínimo de agua necesario para obtener financiación procedente del Feader, en lugar del 25 % que inicialmente estableció la Comisión.
En el acuerdo también se incluye la financiación de proyectos de mejora de eficiencia energética en regadío, la construcción de balsas de regulación y la utilización de aguas recicladas.
Garantiza, además, la compatibilidad del sistema español de seguros agrarios con el nuevo mecanismo de estabilización de rentas.