Ha recordado que los principales productores de consumidores de flores y plantas de la Unión Europea mantienen el tipo reducido para estos productos, como Bélgica y Holanda, donde se grava con un 6%, o Alemania, con un 7%.

    La senadora ha apuntado que en los últimos años el sector se ha visto afectado por otras "circunstancias adversas" como la caída del consumo doméstico y de la demanda ligada a la actividad inmobiliaria y urbanística, o la competencia de terceros países.

    La consecuencia, ha añadido, ha sido la disminución "brutal" de la superficie dedicada a estos cultivos, con una caída del 38 %, y del número de empresas

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