La comisión de Agricultura de la Eurocámara, que aprobó en enero su posición con respecto a la reforma de la PAC, introdujo una enmienda según la cual se amplía la lista de sectores que podrían beneficiarse de ayudas, entre los que está el tabaco.
Ese esquema de ayudas sería voluntario y debería ser decidido por cada Estado miembro, además de ser condicional (sólo estaría permitido en sectores o regiones donde el sector en cuestión afronte dificultades o sea particularmente relevante desde un punto de vista económico, social o medioambiental), precisaron a Efe fuentes comunitarias.
EPHA insistió en que el pleno del Parlamento Europeo (PE), que debe pronunciarse ahora sobre la PAC en su sesión de la próxima semana, debe rechazar la posibilidad recogida en esa enmienda.
En tanto que colegislador en materia presupuestaria de la UE, la asociación pidió al PE "unirse en favor de la salud de sus constituyentes" y rechazar una política "que no hace nada" para que los agricultores sustituyan la producción de tabaco, "uno de los mayores asesinos de Europa", por la de un cultivo "más sostenible".
En esa línea, EPHA denunció el uso de dinero público en tiempos de austeridad y crisis para incrementar la producción "de un cultivo tóxico que causa cerca de 700.000 muertes al año en la UE, y es responsable de costes masivos a la sociedad y pérdidas de productividad".
Kosinska señaló que la comisión parlamentaria de Agricultura tuvo la oportunidad de "forjar una PAC capaz de proporcionar alimentos sostenibles, saludables y nutritivos", pero que a cambio optó por "subsidiar un aumento insostenible de las enfermedades crónicas y debilitar la salud y la productividad de Europa", enfatizó.
Para la asociación, este debate es especialmente relevante en un momento en que la UE tramita la revisión de la normativa que regula el sector del tabaco, que data de hace once años.
El PE tendrá que pronunciarse a continuación sobre una propuesta de la CE al respecto, que aboga por prohibir la comercialización del tabaco con "sustancias caracterizantes" que modifiquen radicalmente el olor y sabor del tabaco.
Además, defiende hacer obligatorias las advertencias en las cajetillas de tabaco, una medida que 13 países europeos, como España, ya aplican de forma voluntaria.
El objetivo de la reforma de la ley es reducir la actual proporción de fumadores en la población europea (27 %) en el 2 % durante los próximos años.