La directora General de Producciones y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), Esperanza Orellana, cree que lograr la competitividad y la rentabilidad ganadera es un objetivo «tan importante o más» que los retos ambientales.
Es «imprescindible» que las explotaciones sean rentables para avanzar en sostenibilidad, ha indicado Orellana este jueves durante un seminario web sobre el presente y el futuro de la ganadería, organizado por el foro de alimentación Qcom.es junto a la plataforma Carne y Salud.
De cara al futuro, es relevante la sostenibilidad medioambiental y Orellana ha valorado los esfuerzos hechos ya por el sector primario para conseguir producir más con menos emisiones.
«El sector ganadero ha logrado reducir sus emisiones pese al incremento productivo y ha sido posible gracias a su excelente trabajo, a los avances y a la innovación».
Ha advertido de que actualmente el concepto «medioambiental» va «mucho más allá de lo climático» y engloba áreas como el bienestar animal o aspectos éticos que «impactan de lleno» en el consumo de carne y otros productos de origen animal, lo que debe icidir en la rentabilidad ganadera..
La pandemia es un «serio desafío» que se une a todo esos retos porque ha generado una «crisis» que Orellana, no obstante, ve como un «buen momento» para lograr una ganadería «más resiliente, fuerte, verde y digital».
Los fondos europeos Next Generation tienen que servir para ello y ha recordado que España podrá destinar «algo más de 1.000 millones» para el impulso de energías renovables, mejoras en bioseguridad, modernización de explotaciones o desarrollo de equipos tecnológicos de precisión.
En su intervención, ha hecho alusión a la Ley de la Cadena Alimentaria y ha resaltado la importancia de los contratos por escrito o de que el ganadero conozca con anterioridad a la venta de su producción cuánto percibirá por ella.
«Parece mentira que todavía tengamos dificultades para que un productor sepa lo que percibirá», ha rematado.
Por su parte, los ingenieros Carlos Martín y Manuel del Pozo, ambos con cargos en la Dirección General de Agricultura de la Comisión Europea, han indicado que la «palabra del futuro» es la «sostenibilidad».
La «medioambiental es, probablemente, la acepción más común pero no hay que olvidar nunca la parte social y económica».
Han detallado una lista de acciones, con su calendario europeo de cumplimiento, en materia de producción, transformación y distribución sostenible, entre las que han nombrado la evaluación y revisión de la legislación en materia de bienestar animal (para el cuarto trimestre de 2023) o el desarrollo de un plan de contingencia para garantizar el suministro de alimentos y la seguridad alimentaria (cuarto trimestre de 2021).
Han indicado que la sostenibilidad medioambiental se buscará a través de aspectos como un alimentación de precisión para el ganado, la genética de razas adaptada, acciones circulares en granjas como el reciclaje de estiércol, potenciar el pasto como sumidero de carbono o incluso vacunar al ganado para inhibir la expulsión de metano.
LOS GANADEROS TIENEN UN «COMPROMISO REALISTA» CON UNA PRODUCCIÓN «MÁS VERDE Y DIGITAL»
Avanzar en sostenibilidad social incluye los programas de bienestar animal o aspectos nutricionales porque «son valorados por la sociedad» mientras que en el eje de la sostenibilidad económica la Comisión se centra mucho en las acciones de cooperación de las organizaciones de productores y la «transparencia» que es «fundamental» para que los agricultores «tengan mejor y más actualizada» la información sobre el mercado.
El sector ganadero ha estado ampliamente representado por diferentes asociaciones como las Cooperativas Agro-alimentarias cuyo vicepresidente, Juan Rafael Leal, ha subrayado que los ganaderos, especialmente los cooperativistas, tienen un «compromiso realista» con una producción «más verde y digital».
El secretario general de Asaja Cádiz, Luis Ramírez, se ha centrado en la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) que ve «prácticamente cocinada y servida» y echa en falta que el Gobierno central hubiese puesto en valor «sin complejos» el modelo español de ganadería extensiva ante las instituciones europeas.
El responsable de Porcino de COAG, Jaume Bernis, ha asegurado que su organización apuesta «claramente» por la sostenibilidad y, por otro lado, ha alertado del problema del lobo y del jabalí para el desarrollo de la cabaña ganadera y cómo su expansión puede dificultar el futuro de ese sector y del desarrollo rural.
El secretario de Ganadería de UPA, Román Santalla, ha indicado que la ganadería se está «esforzando todo lo que puede» para ser «más sostenible» pero, a pesar de ello, está siendo tratada de forma «injusta, a nivel general», y a ello se añade una cadena de valor «que no acaba de funcionar».
En el encuentro sobre la rentabilidad ganadera también han participado asociaciones de productores de vacuno de carne (Asoprovac), porcino blanco (Anprogapor), ovino de carne (Ovicebo) y cunícola (Cuniber) quienes han centrado sus intervenciones también sobre aspectos sanitarios, económicos, de bienestar animal y de sostenibilidad que marcarán el futuro.