El Gobierno de Cantabria, junto al Colegio de Farmacéuticos de Cantabria y al Ayuntamiento de Camaleño, ha conseguido que por primera vez este año sea posible un tratamiento pionero frente a las malformaciones que sufren al nacer numerosos terneros de la comarca de Liébana, conocidos en la zona como ‘chánganos’.
El tratamiento se ha realizado con carácter previo a la subida del ganado bovino de los diferentes pueblos del valle de Camaleño al puerto de Áliva para permanecer durante el verano en sus praderías, explica en una nota de prensa la Consejería de Ganadería.
El tratamiento ha consistido en la administración de ácido fólico en forma de ampollas inyectables a las hembras de ganado bovino para prevenir las malformaciones, las dificultades en los movimientos y la ceguera que padecen algunos terneros de las explotaciones de este valle lebaniego.
Estas malformaciones en los terneros se trata de una patología denominada mielodisplasia congénita que afecta a terneros que nacen entre febrero y marzo de hembras que pastan a más de 1.300 metros de altitud y que está asociada al consumo de plantas teratógenas al inicio del pastoreo.
Este tipo de lesión fue descrita y diagnosticada en 2011 como fruto de la colaboración entre el departamento de Sanidad Animal de la Universidad de León, el Instituto de Desarrollo Ganadero y Sanidad Animal de León, el Centro de Investigación y Formación Agrarias del Gobierno de Cantabria y los veterinarios clínicos de la zona. Y tiene su origen en un desarrollo anómalo embrionario del tubo neural.
Por ello, se planteó su tratamiento mediante la administración de ácido fólico para prevenir este tipo de anomalías, teniendo en cuenta la época de cubriciones y de entrada al puerto.
Sin embargo, la inexistencia de un medicamento comercializado exclusivamente de ácido fólico que permitiera aplicar la dosis necesaria ha impedido hasta la actualidad la aplicación del tratamiento.
Este año con el esfuerzo de la Consejería de Ganadería se ha logrado administrar el tratamiento, que consta de una segunda dosis que se administrará dentro de 15 días, gracias a la colaboración entre el Gobierno de Cantabria, el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cantabria y el Ayuntamiento de Camaleño.
El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha destacado la puesta en marcha de esta iniciativa, que «ha sido posible gracias al interés y el esfuerzo» que han realizado las partes implicadas para proteger la salud animal de la explotaciones.
También ha reconocido el trabajo desarrollado por los veterinarios de la zona, que se han encargado de la prescripción del medicamento como fórmula magistral para su dispensación en las farmacias de la comarca, así como al Ayuntamiento de Camaleño, por hacerse cargo del importe.
Blanco ha destacado los esfuerzos de su departamento por garantizar la sanidad animal de las explotaciones cántabras con medidas de prevención y control y que las enfermedades animales incidan lo menos posible en la salud del sector.
Y ha reiterado el compromiso de la Consejería de colaborar y ofrecer toda su ayuda a los profesionales ganaderos de la región para atender sus necesidades.
(Fotos: Archivo)