Como las medidas excepcionales tomadas por la Comisión Europea no se han considerado adecuadas para aliviar los angustiados mercados agroalimentarios, la idea de desplegar el fondo de crisis no utilizado hasta ahora, establecido en la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) de 2013, está llegando a la actualidad, aunque por el momento provoca más rechazo que aplausos en el sector, que ve cómo daría lugar a los recortes correspondientes en los pagos directos.

Después de que la Comisión adoptó un conjunto de medidas de mercado solicitadas por la industria, la reacción del sector fue unánime: la iniciativa va en la dirección correcta pero el dinero asignado es demasiado poco.

Sin embargo, las arcas de la Comisión Europea son estrechas, a menos que se active el llamado fondo de reserva de crisis. Este fondo de reserva para crisis es una herramienta introducida por la PAC 2013, diseñada para apoyar al sector cuando las crisis afectan la producción y / o distribución.

El fondo se puede utilizar para financiar medidas excepcionales para contrarrestar la interrupción del mercado y se establece cada año mediante reducciones a los pagos directos bajo el mecanismo de disciplina financiera. La reserva de crisis nunca se ha utilizado, por lo que cada año se devuelve al sector, pero ahora hay llamadas para hacerlo.

Cara y cruz de utilizar estos fondos

El ejecutivo de la UE está a favor de utilizar la reserva de crisis, pero carece del respaldo de los Estados miembros y de gran parte del sector.

Al hablar en la reunión del Comité de Agricultura del Parlamento Europeo la semana pasada, el Comisionado de Agricultura, Janusz Wojciechowski, dijo que la PAC «no fue diseñada para hacer frente a crisis a esta escala» y que, como tal, apoyaría el uso del fondo de crisis.

Otro defensor del despliegue del fondo es el experimentado eurodiputado socialista Paolo De Castro, quien fue el relator del Parlamento Europeo durante la reforma de la PAC de 2013.

Según él, la reserva fue concebida precisamente para este tipo de situación. «Dejamos de lado 478 millones de euros en el fondo, debemos tener el coraje de ponerlo a disposición de los productores lo antes posible», dijo.

Sin embargo, los Estados miembros, pero también la asociación de agricultores COPA-COGECA, no están dispuestos a aceptar, confirmó una fuente de la Comisión a EURACTIV, debido a que la activación del fondo daría lugar a los recortes correspondientes en los pagos directos.

Los Estados miembros, pero también la asociación de agricultores COPA-COGECA, no están dispuestos a permitir que esto suceda ya que piensan que, en esta situación excepcional, la ayuda para los agricultores no puede ser eliminada.

El fondo no brindaría ningún beneficio adicional para los agricultores que sufren, sino que simplemente transferiría dinero de un bolsillo a otro, dijo una fuente de COPA-COGECA a EURACTIV.

«Vemos qué países como Estados Unidos o Canadá están poniendo sobre la mesa para ayudar a sus comunidades agrícolas y esperamos que la Comisión intensifique sus esfuerzos para ayudar también a los agricultores europeos», agregó la fuente.

Para evitar situaciones similares que surjan en el futuro, la próxima propuesta de PAC de la Comisión incluye la idea de desacoplar el uso del fondo con la reducción de los pagos directos para los agricultores.

Wojciechowski dijo que en el futuro apoyaría una propuesta de un fondo de crisis que no depende de subsidios o ayuda, sino que es una «reserva adecuada de crisis a disposición de la comisión que luego se puede utilizar cuando nos enfrentamos con un crisis grave «. Agregó que esta reserva de crisis debería ser mayor que el fondo actualmente en vigor.

En el mandato de negociación de la PAC de transición, el comité de Agricultura aprobó una enmienda de De Castro, que pedía que la reserva de crisis se financiara desde fuera de la PAC al nivel actual a partir de 2021, sin tener que devolverla si no se usa , y con la posibilidad de aumentarlo sin límites.

Texto: Gerardo Fortuna y Natasha Foote | EURACTIV.com)

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