Lo han venido denunciando en el sector del ovino y caprino y del vacuno. Y ahora llega al porcino ibérico. Muchos compradores están aprovechando una situación de crisis para no respetar los precios pactados previamente, además de condicionar el pago a seis meses vista en algunas ocasiones, según ha denunciado Asaja Cádiz, que advierte de que el sector está al límite y pide ayudas urgentes al Gobierno.
La organización recuerda que la producción de cerdo ibérico es una de las grandes perjudicadas por la crisis del coronavirus, provocada en gran parte por el cierre del canal HORECA y la consecuente caída de la demanda.
Las explotaciones se empiezan a encontrar en una situación límite por no poder dar salida a sus productos, con el agravante de que se han cerrado muchos cebaderos y mataderos. Lo peor y más alarmante es que también hemos detectado grandes abusos por parte de compradores, aprovechando una situación de crisis para no respetar los precios pactados previamente, además de condicionar el pago a seis meses vista en algunas ocasiones.
Tras las últimas protestas y movilizaciones de ASAJA, COAG, UPA y Cooperativas Agroalimentarias, el Gobierno aprobó el Real Decreto 5/2020. Desde Asaja Cádiz demandan la aplicación del primer artículo de dicho Real Decreto (en este se recoge que no se puede vender por debajo de costes de producción, es decir; que el productor primario debería recibir de su primer comprador un precio que cubriera al menos el coste de producción), el cual se está ignorando apenas mes y medio desde su aprobación, y tendemos la mano para seguir trabajando en medidas más efectivas para la sostenibilidad del sector, ya que ésta seguimos opinando que está mal enfocada y que no ataca la raíz del problema.
Desde ASAJA Cádiz, de forma conjunta con el resto de las ASAJA provinciales y coordinados por ASAJA Nacional, se ha puesto en conocimiento del Ministerio de Agricultura la difícil situación que atraviesa este emblemático sector al tiempo que se han solicitado medidas concretas a implantar, entre ellas y muy importante, que una vez se restablezca la apertura de cebaderos y mataderos, se deben de respetar los acuerdos y tratos alcanzados en las mismas condiciones en que se pactaron, no bajar precios ni penalizar por peso, entre otras cuestiones.