Esteban Meño Manso / Delegado Asociación Española de Rehalas en Guadalajara

Aunque este aficionado, que fue socio de A.E.R., llevaba un tiempo retirado del
mundo cinegético, durante muchos años Miguel regentó una de las rehalas más
punteras del país y era muy reconocido en el mundo venatorio. Una de las rehalas
más bonitas que he conocido era la de Miguel, divisa bandera nacional sobre cuero
y goma amarilla. Con multitud de premios en su haber, es una verdadera pena que
ya no exista, aún recuerdo algunos de sus grandes perros, Alatriste o Trabuco, dos
magníficos ejemplares de urracos.

Siempre con la sonrisa en la boca y dispuesto a ayudar a quien lo necesitase, era
una de esas personas afables que siempre lograba hacerte sonreír, se van
demasiado pronto los mejores.

Ahora estarás en la montería del cielo junto a Alatriste y el resto de tus guerreros,
salúdalos de nuestra parte y ya sabes que aquí abajo siempre te recordaremos con
cariño. Estarás con nosotros en cada suelta, llevando nuestra mano, avisándonos
de los agarres y ayudándonos a recoger los perros.

Con el permiso de Perico, siempre que veamos un perro urraco nos acordaremos
del gran Miguel Feijoo.

Descansa en paz amigo.

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