EFE.- El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Lluís Recoder, amenazó ayer en el Parlament al Gobierno con acciones legales si comenzaban las obras de descontaminación del embalse de Flix antes de que estén finalizadas las obras de abastecimiento alternativo de agua de los municipios cercanos.
La descontaminación, que cuenta con una inversión de más de 200 millones, tiene un plan de emergencia que, según el Gobierno, garantiza que el 100 % de la población podría abastecerse en el hipotético caso de que se produjera un episodio de contaminación
Ante las amenazas vertidas ayer por Recoder, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) afirma que "el proyecto de descontaminación del embalse de Flix se está haciendo con todas las garantías, los mejores especialistas y las técnicas más adecuadas, lo que constituye una excelente noticia para el medio ambiente y para los vecinos de esta zona de Cataluña, ya que supone una descontaminación histórica".
En este sentido, el secretario de Estado de Medio Ambiente del Ministerio, Federico Ramos, ha calificado las críticas al proyecto formuladas por Recoder de "graves, por irresponsables y electoralistas".
"Como conseller de Medio Ambiente, debería dar explicaciones a los ciudadanos de qué intereses le llevan a tratar de obstaculizar una iniciativa medioambientalmente tan ambiciosa como esta, incumpliendo sus compromisos y poniendo en riesgo la cofinanciación europea a un proyecto que cuenta con una inversión de más de 200 millones de euros", ha dicho Ramos.
Ramos ha resaltado que "es rotundamente falso que si se produjera un episodio de contaminación gran parte de la población solo tendría agua garantizada durante un corto periodo de tiempo, ya que el Plan de Emergencia aprobado asegura que el 100 % de la población podría abastecerse con garantías".
Asimismo, Ramos ha señalado que no existe decisión alguna sobre iniciar o no las tareas de dragado de los lodos, sino que actualmente, finalizadas las labores previas, la obra se encuentra a disposición de comenzar el dragado.
Por otra parte, el presidente del Consell Comarcal de la Ribera d’Ebre, Jordi Jardí, ha criticado hoy la postura del Ayuntamiento de Flix, que ha lamentado que Recoder quiera parar las obras de descontaminación del embalse y ha exigido una rectificación al conseller de Territorio y Sostenibilidad.
Al respecto, Jardí ha denunciado la "falta de generosidad" y "el egoísmo localista" del alcalde de Flix, además de posicionarse junto al Govern porque le parece "el posicionamiento más sensato y más coherente".
Según el presidente comarcal, "cuando se plantea un plan de emergencia para una posible eventualidad es porque hay un riesgo y el alcalde de Flix debe ser consciente de que su actitud está poniendo en riesgo la salud de los vecinos de todas las Tierras del Ebro".