El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, ha asegurado este sábado 19 que la Unión Europea (UE) aplicará las «mismas medidas» que ha tomado Estados Unidos respecto a la imposición de aranceles, principalmente las que afectan al sector aeronáutico y mira a la lista de sanciones que ya se barajó en abril de este año por la guerra del acero.
Por eso, desde Bruselas se está rescantando de sus cajones una lista preparada con cientos de productos a los que gravar, con especial foco en la alimentación.
Fue en abril de este año fue cuando la Comisión anunció esta posible lista de sanciones por valor de 20.000 millones de dólares, aunque la petición que hizo a la OMC fue de 12.000 millones. Aun así, la amenaza está en el aire.
Los productos afectados en esta lista de sanciones son realmente variados. Salmón, atún, bacalao, merluza, langosta, calamar, pulpo, quesos (como el tipo cheddar), esponjas naturales, trufas, champiñones, cebollas, patatas, verduras o frutos secos.
las sanciones europeas deberán esperar cuatro meses, hasta que haya sentencia sobre Boeing
En declaraciones a los periodistas en Córdoba, donde ha presentado su candidatura al Congreso de los Diputados, Planas ha expuesto que ayer «se impusieron definitivamente» los aranceles por parte de Estados unidos y la Comisión Europea ha reaccionado «con firmeza».
Una respuesta acorde a lo que habían pedido «España y otros Estados miembros», particularmente los que conforman el «consorcio de Airbus», como son «Francia, Alemania, España y Reino Unido», de tal forma que cuando llegue «el plan en los próximos meses en relación con el tema Boeing» se aplicarán «las mismas medidas que nos ha aplicado Estados Unidos a nosotros», aunque para ello se deberá espera cuatro meses aproximadamente.
Ha añadido que el plan es «intentar llegar a una negociación» y conseguir «lo que sería el objetivo último» que es «evitar que el campo agroalimentario y el sector se viera sacudido por esta guerra de aranceles» que «no es buena no solo para productores e industria» sino que tampoco para los consumidores ante el «incremento del precio de los productos».
De esta manera, ha resaltado la postura de «firmeza» de Europa en la «defensa de los intereses comerciales» y, por otra parte, ya se está «dando cobertura a todos los sectores» que se verán afectados por la aplicación de los aranceles.