La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible pone a disposición de los técnicos de las Agrupaciones para Tratamientos Integrados en Agricultura (Atria) y las Agrupaciones de Producción Integrada (API) una plataforma digital que permite conocer la incidencia de la mosca del olivo con hasta cuatro semanas de antelación. Esta herramienta es el resultado de la colaboración del Gobierno andaluz y empresas especializadas en Big Data e inteligencia artificial, para lo que han resultado imprescindibles los datos generados por los propios técnicos de Atria y API, así como la Red Dacus promovida por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
La plataforma, desarrollada por la empresa andaluza ec2ce y cuya información se actualiza semanalmente, nace con el objetivo de ser un elemento más en la lucha contra la mosca del olivo. Las pruebas realizadas para el testado de este modelo predictivo han demostrado su eficacia y utilidad, ya que el acierto alcanza el 80% en el caso de información con cuatro semanas de antelación y supera el 90% cuando los datos se refieren a la semana inmediatamente posterior.
La Junta de Andalucía apuesta constantemente por la aplicación de las nuevas tecnologías para la resolución de problemas que afectan al día a día de los agricultores. En este caso concreto, conocer el momento adecuado para realizar las aplicaciones con anticipación resulta de vital importancia para técnicos y agricultores porque de esta forma se maximiza su eficacia y, por tanto, se reducen al mínimo posible los daños que la plaga podría ocasionar en los cultivos.
Además, la información facilitada por la plataforma permite determinar también aquellas situaciones en las que no es necesario emplear fitosanitarios, evitando así aplicaciones innecesarias y contribuyendo a la reducción del uso de estos productos.
Actualmente, la mosca del olivo (Bactrocera oleae) es la principal plaga del olivar en Andalucía, ya que incide directamente en la cantidad y calidad de los aceites obtenidos. Esta plaga podría llegar a generar pérdidas de hasta el 80% del valor de la cosecha si se dan las condiciones favorables para su desarrollo y no se realiza un control eficaz sobre la misma.