Aún se encuentra en período de alegaciones y por tanto pendiente de aprobación y publicación en el Boletín Oficial de la Comunidad de Castilla y León la regulación y convocatoria de ayudas, motivadas por la sequía, destinadas a garantizar el suministro de agua a las explotaciones ganaderas en régimen de aprovechamiento de pastos.
Pese a que los ganaderos vienen padeciendo las adversidades climáticas durante la mayor parte de la campaña presente, la convocatoria de ayudas no se publicará, y eso con suerte, hasta la última decena de agosto, bien avanzada por tanto la época estival de mayores exigencias de aporte de agua a la cabaña ganadera. Por ello, COAG Castilla y León urge a la Administración Autonómica la inmediata apertura del plazo de solicitudes de ayuda. Si ya la convocatoria de 2017 resultó excesivamente tardía, cabe recordar que incluso entonces se pudieron solicitar las ayudas a partir de primeros de julio.
En principio serán actividades subvencionables las estructuras de abastecimiento de agua tales como balsas, abrevaderos y sus conducciones de aporte, cisternas móviles o abrevaderos móviles y servicios de suministro a explotaciones ganaderas.
COAG solicita la ampliación de las subvenciones para dar cobertura también a pequeñas inversiones en captaciones o sondeos de menos de 7.000 mᵌ/año, incluida su equipación de bombas y sistemas de suministro energético.
Por otro lado, desde la Administración se propone abrir la convocatoria de las ayudas únicamente a las explotaciones extensivas en régimen de aprovechamiento de pastos, argumentando que forma parte del sistema tradicional de aprovechamiento de recursos naturales, sufriendo una importante falta de agua que ha afectado directamente a los pastos y el acceso al agua en las zonas con aprovechamiento habitual de pastos. Pero en esta misma situación se encuentran las explotaciones ganaderas semiextensivas que también realizan aprovechamiento de pastos, por lo que COAG solicita que estas también puedan tener acceso a las ayudas.
Conviene tener muy presente que ninguna otra actividad actúa como la ganadería, y muy especialmente en su vertiente extensiva y semiextensiva, fijando población en el medio rural y contribuyendo a la conservación del medio ambiente, y que resultan imprescindibles todas cuantas medidas de apoyo a su mantenimiento se puedan articular desde la Administración.