La Saca de las Yeguas es un evento de gran atractivo turístico y cultural que congrega cada año a más de 100.000 espectadores que tienen la oportunidad de contemplar en directo una parte de la tradición e historia de la cultura ganadera de nuestro País. Participan más de 1000 personas, entre los que se cuentan mayoritariamente los yegüerizos, conformando un dispositivo que desde el 20 de junio comienza a trabajar en la recogida del ganado para culminar, el día 26 de junio, en la espectacular Saca de las Yeguas, prosiguiendo con la feria ganadera que se realiza en los días posteriores en el Recinto Ganadero Municipal de Almonte.

La tradición ganadera de las Marismas del Guadalquivir y de estos parajes de Doñana es milenaria. Las primeras referencias se deben al historiador romano Claudio Claudiano que dejó escrito que los caballos utilizados en las carreras de carros en los juegos circenses de Roma, durante los siglos III al VI, provenían de La Lusitania y de La Bética, destacando que estos caballos existían con mucha antelación a la llegada de los romanos, pero fueron ellos quienes desarrollaron y extendieron su crianza.

El obispo San Isidoro de Sevilla (siglo VI d. C.) también dejó constancia de la crianza y fama de los caballos de las marismas del Guadalquivir. Durante la Época Musulmana, estos animales fueron esenciales en sus ejércitos, y desde mediados del siglo IX tenían un establecimiento de cría caballar en estas marismas, fijándose su centro reproductor en Isla Menor. De estos años son las que podrían considerarse las primeras sacas anuales masivas de yeguas con sus potros, de las marismas hacia el Palacio de Medina Azahara en Córdoba. Tras la conquista castellana, es Alfonso X, en 1269, quien establece una Mancomunidad de Pastos que perduraría hasta recién entrado el siglo XVI.

Es en el año 1504 cuando se regulariza el evento de la Saca de las Yeguas, recogiéndose en las Ordenanzas del Duque de Medina Sidonia esta tradición de la cría caballar en Doñana y el desplazamiento de los animales que pastaban en los pastos comunales hasta el pueblo de Almonte. En estas ordenanzas aparece la figura del yegüerizo y se establece la Saca de Yeguas de forma anual a partir del día de San Juan (24 de junio), coincidiendo con el inicio del verano.

Como característica fundamental destaca la extrema resistencia de estos équidos, lo que llamó la atención de Cristóbal Colón que decidió llevarse en su segundo viaje a América siete yeguas reproductoras de las Marismas del Guadalquivir para la creación del Primer Hato Caballar Real, tras el fracaso en la adaptación de los caballos que se llevó en su primer viaje.

Un acontecimiento tiene especial interés turístico en el público en general, llegando a movilizar a más de 100.000 personas

La entidad organizadora del evento es la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Marismeño. Este evento es totalmente gratuito y de libre acceso. La Saca de las Yeguas y su posterior Certamen será el punto neurálgico donde confluirán miles de personas, dado el atractivo turístico que genera esta actividad, única en Andalucía.

Este acontecimiento tiene especial interés turístico en el público en general, llegando a movilizar, en el traslado de las yeguas marismeñas desde Doñana hacia Almonte a más de 100.000 personas.

La Saca de las Yeguas está incluida como concurso y exposición nacional de ganado desde el año 2018. El día 26 de junio se produce el traslado de las yeguas, recogidas por los criadores durante los días previos, desde el Espacio Natural al municipio de Almonte.

Todas las yeguas pasan en tropas por la aldea de El Rocío recorriendo varias calles hasta llegar a la Ermita, siguiendo su camino para salir de la aldea y dirigirse a Almonte. Una vez llegados allí, los animales son conducidos hasta el Recinto Ganadero de Almonte.

El certamen en sí se celebra en el municipio de Almonte (Huelva), en el Recinto Ganadero municipal situado en el Camino de Villalba, entre los días 27, 28, 29 y 30 de junio.

Dada a singularidad de esta raza, es en estas fechas donde se realizan las labores de manejo del ganado, por la imposibilidad de manipular el ganado durante el resto del año. Entre estas labores, se produce la identificación de los nuevos potros, así como la calificación de los animales de la raza y su recensado, en lo que respecta al libro genealógico.

Debido a la regulación de las plazas de ganado en el Espacio Natural, también se retiran los animales excedentes que son destinados a la venta para reposición de la raza o para monta, así como un importante número de potros que se destinan a cebadero para la producción cárnica.

×