El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ha detenido a cuatro personas e investiga a otras seis por su supuesta pertenencia una organización delictiva dedicada al embotellamiento y venta de vino de manera masiva y fraudulenta, que abría alcanzado los dos millones de botellas.
El instituto armado ha informado este lunes 20 de que la estafa consistía en la puesta en el mercado nacional e internacional de dos millones de botellas para hacerlas pasar por vino de la Denominación de Origen Bierzo (León) e Indicación Geográfica Protegida (IGP) de Vino de la Tierra de Castilla y León.
A los detenidos e investigados se les atribuye la supuesta comisión de delitos de estafa continuada, fraude, falsificación, utilización ilegítima de figuras de calidad y blanqueo de capitales.
En la operación se han practicado once registros en naves y domicilios ubicados en las provincias de León, Orense, Lugo y Pontevedra.
La operación se inició en diciembre de 2018, cuando el Consejo Regulador Denominación de Origen Bierzo denunció ante la Guardia Civil irregularidades detectadas en varias contraetiquetas del vino que se encontraban en el mercado.
ponían en el mercado vino de manera fraudulenta bajo las figuras de calidad DO Bierzo e IGP Vino de la Tierra de Castilla y León
A partir de ese momento, los agentes realizaron numerosos controles del vino dispuesto para la venta en establecimientos comerciales, en los que detectaron irregularidades en varias marcas, por lo que inmovilizó de forma cautelar cerca de 8.000 botellas en diferentes provincias.
Además, los agentes detectaron varias empresas relacionadas con el sector del vino que de manera organizada embotellaban y ponían en el mercado vino de manera fraudulenta e ilegítimamente bajo las figuras de calidad DO Bierzo e IGP Vino de la Tierra de Castilla y León.
Para ello utilizaban contraetiquetas y registros embotelladores falsificados en los que atribuían al vino características de las que carecía y con un sobreprecio a la hora de ponerlo en el mercado.
Mediante las once entradas y registros desarrolladas, los agentes obtuvieron «numerosas evidencias» de la actividad que se estaba desarrollando e intervinieron abundante documentación, varios cientos de miles de contraetiquetas falsificadas, diversos efectos y un total de 335.000 euros. Intervinieron además todo el vino afectado que se había puesto en el mercado.
(Foto: Guardia Civil)