COAG Andalucía ha hecho un llamamiento al sector y a la venta ordinaria de aceite por las cooperativas para que no se dejen amedrentar ante «las prácticas especulativas que dibujan una realidad ficticia para atemorizar a los productores y hacerlos vender el aceite a precios por debajo de la rentabilidad».
El escenario actual, con 271.658 toneladas en las bodegas, no justifica que el aceite se encuentre en origen a precios casi un euro más bajos que en 2017. La campaña pasada (2017/18) comenzaba con 231.700 toneladas y la anterior (2016/17), con 244.100 toneladas. Por tanto, estamos en cifras similares a las de los últimos años, y muy lejos de las 418.700 toneladas que había en octubre de 2014.
COAG ya apuntó hace unos meses que se había extendido la idea de que nos encontramos en una situación de excedente de producto en el mercado cuando no es así. Según los últimos datos de la AICA (Agencia de Información y Control Alimentarios), el pasado mes de octubre había un total de 271.658 toneladas de aceite, de las cuales 128.337 estaban en almazaras, 6.002 en el Patrimonio Comunal Olivarero y 137.317 en envasadoras.
COAG pide a los olivareros “que sean sensatos y en el futuro, a la hora de vender en origen, no se dejen llevar por los mensajes interesados»
El responsable del sector del aceite de COAG Andalucía, Juan Luis Ávila, advierte en su llamamiento al sector de que hay determinadas “estrategias empresariales” que vaticinaban unos escenarios que no se han cumplido y que han hecho que se malvendiera el aceite, muchas veces incluso a precios por debajo de los costes de producción. E insiste en que “esperamos que antes de aplicar esas estrategias se piense mejor, porque se está haciendo mucho daño al sector” con miles de millones de pérdidas, unos 80 céntimos por kilo de aceite.
Por eso, COAG pide a los olivareros “que sean sensatos y en el futuro, a la hora de vender el aceite en origen, no se dejen llevar por los mensajes interesados, que se fíen más de los datos reales que de los ‘macutazos’ que se den en el sector”. “Llama la atención la enorme celeridad a la hora de recoger el aceite, mientras las cifras de aceite en las envasadoras siguen siendo las mismas, por eso es importante que haya controles efectivos para garantizar la transparencia de control, con medios suficientes, para garantizar la fiabilidad de los datos».
Esta organización recuerda en su llamamiento al sector que, según las últimas previsiones del COI (Consejo Oleícola Internacional), la producción mundial bajará un 7,6% hasta situarse en 3.064.000 toneladas, mientras que el consumo subirá un 9%. Y aunque en España las estimaciones son que la producción suba un 23,3%, hasta 1.550.000 toneladas de aceite, apenas si cubre la bajada de aceite internacional, porque otros países productores como Italia esperan cosechas muy bajas.