La Guardia Civil ha detenido, acusado de dos delitos de hurto, a G.L·L., un vecino de 60 años de Adra (Almería) que presuntamente ha sustraído 238 colmenas valoradas en 30.500 euros y ha causado la muerte de más de cuatro millones de abejas.
El teniente Manuel Serrano ha explicado en declaraciones a los medios en Felix (Almería) que la investigación comenzó en julio y que tras esto el hombre ha sido detenido en dos ocasiones por llevarse colmenas que no eran suyas, si bien se desconoce la finalidad última de estas acciones.
Ha concretado que un equipo ROCA dio con él y consiguió recuperar 59 colmenas valoradas en 8.370 euros que han podido ser entregadas a su propietario y «muchas más que a pesar de no tener localizado al dueño no son suyas, porque tienen los registros modificados para simular» que eran de él.
En el último año y medio se han llevado a cabo 700 actuaciones relacionadas con el sector apícola de la provincia de Almería
«No sabemos el uso que les estaba dando», ha insistido, apuntando que posiblemente parte las destinaba a invernaderos cuyos propietarios desconocían el origen de las mismas, o incluso para la producción de miel, ya que contaba con un número de explotador de colmenas.
Serrano ha señalado que existe un gran número de denuncias por este tipo de robos, algo confirmado por el teniente Sergio López, jefe de sección del Seprona de la Comandancia de Almería, quien ha señalado que en el último año y medio se han llevado a cabo 700 actuaciones relacionadas con el sector apícola de la provincia.
La mayor parte de ellas de carácter preventivo a cargo de patrullas de Seguridad Ciudadana, los equipos ROCA y el Seprona, aunque en este periodo se ha detenido e investigado a siete personas por hechos similares y recuperado unas 500 colmenas de las entre 900 y mil cuya sustracción ha sido denunciada en Almería.
López ha recalcado que este tipo de delitos son realizados por personas cercanas al sector apícola: «Si no es un apicultor, tiene conocimientos de apicultura».
Una de las víctimas, Luis Pérez, dueño de las 59 colmenas recuperadas, ha señalado que se trata de una «situación difícil de tratar» y ha relatado cómo hace dos años inició su proyecto apícola, algo que conllevó «mucha inversión».
Han podido fallecer sobre cuatro millones de abejas debido a la deficiente manipulación y nulo mantenimiento de las mismas
«Cada colmena cuesta unos 120 euros, los enjambres 60. Tengo unas 300, sólo hay que multiplicar», añade el apicultor, quién revela que además de las 59 colmenas robadas se encontró con que las abejas de otras siete habían muerto «porque habían cerrado las piqueras y se asfixiaron».
Según la Guardia Civil, de todas las colmenas encontradas hay un centenar muertas, por lo que podrían haber fallecido en torno a cuatro millones de abejas debido a la deficiente manipulación y nulo mantenimiento de las mismas.
Los agentes de la Guardia Civil observan cómo hay colmenas de diferentes apicultores, y continúan recabando información sobre sus legítimos titulares, averiguando que otra víctima había denunciado con anterioridad el robo de 178 colmenas valoradas en 22.140 euros de las que parte se encuentran en el lugar.
El saqueo de colmenas lleva años siendo una preocupación para el sector apícola, que cuenta, en total con 25.000 apicultores y es considerado según datos del Ministerio de Agricultura como el mayor de Europa en número de colmenas y producción de miel.