La Consejería de Agricultura y Ganadería de Castilla y León ha publicado este viernes 8 de junio la convocatoria de ayudas por 1,6 millones de euros para mejorar la producción y comercialización de miel elaborada en la autonomía.
Se trata de que esa producción y comercialización se adapte a la nueva normativa nacional y comunitaria y con las ayudas los apicultores de la Comunidad podrán beneficiarse de seis líneas de subvenciones, que pueden solicitarse desde mañana y durante veinte días naturales.
En concreto para recibir información y asistencia técnica; luchar contra los agresores y enfermedades de la colmena, como la varroosis; a racionalizar la trashumancia; medidas de apoyo para el análisis de la miel; repoblación de la cabaña apícola; y mejora de la calidad de los productos apícolas con el objetivo de posicionarlos en el mercado a través de la diferenciación.
se dará prioridad a los jóvenes y a las mujeres
Los beneficiarios de estas ayudas serán apicultores que tengan, al menos, 150 colmenas, así como cooperativas apícolas y organizaciones representativas con personalidad jurídica propia, y los laboratorios, debidamente acreditados, que efectúen análisis de las características fisicoquímicas de la miel.
Además, se dará prioridad a los jóvenes y a las mujeres, con el objetivo de fomentar la incorporación al campo y fijar población en el medio rural.
Para recibir estas subvenciones, los beneficiarios deberán realizar la actividad apícola con anterioridad al 1 de enero de 2018, encontrarse al corriente de sus obligaciones tributarias, tener contratado un seguro de responsabilidad civil para desarrollar la actividad y realizar, al menos, un tratamiento frente a la varroosis.
el sector apícola aporte un valor económico en torno a los 14,5 millones de euros
La ayuda máxima puede llegar hasta el 100 % en el caso de solicitarla para información y asistencia técnica apícola, para luchar contra los agresores y enfermedades de la colmena y para mejorar la calidad de los productos apícolas; a un 90 % si es para apoyo para el análisis de la miel; y a un 80 % si es para racionalizar la trashumancia o para repoblar la cabaña apícola.
En la nueva normativa nacional se han introducido modificaciones que afectan fundamentalmente a los criterios de otorgamiento de la subvención, lo que hace necesario la publicación de nuevas bases autonómicas reguladoras que recojan esas novedades.
La producción anual de miel en la Comunidad es cercana a los cinco millones de kilos, lo que hace que el sector apícola aporte un valor económico en torno a los 14,5 millones de euros, de los que el 97 % se debe a la producción de miel y el resto a la cera.