Un estudio, realizado entre otras entidades por el Instituto de Investigación Indehesa de la Universidad de Extremadura (UEX), advierte de la amenaza que supone en los castañares europeos la avispilla del castaño, una especie invasora con reproducción clónica.
Según ha informado este miércoles 2 de mayo la UEX en nota de prensa, el estudio molecular sobre esta especie (Dryocosmus kuriphilus) ha puesto de manifiesto que la avispilla es partenogenética estricta, es decir, las hembras producen más hembras sin necesidad de ser fecundadas por un macho.
Esta ha sido la principal conclusión de la investigación, publicada en la revista Scientific Reports, llevada a cabo también por investigadores de la Universidad de Córdoba, el Creaf y el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos CSIC-UCLM-JCCM
«Es muy probable que la población de avispilla del castaño proceda de muy pocas hembras introducidas accidentalmente en Italia a partir de material vegetal infestado traído de China en 2006, por lo que su diversidad genética es nula en los genes analizados», explica el investigador Raúl Bonal, de la Universidad de Extremadura.
hasta ahora no se han descrito machos de esta especie
Los investigadores han genotipado avispillas colectadas en zonas de Andalucía afectadas y en concreto han secuenciado y revisado 5 genes (3 mitocondriales y 2 nucleares) y los han comparado con las secuencias de otros individuos recogidos en otras zonas invadidas en Europa y de su área natural de distribución en Asia.
Los resultados muestran que, en las áreas invadidas de Europa, las poblaciones son genéticamente homogéneas surgidas de uno o pocos individuos.
Según Bonal, hasta ahora no se han descrito machos de esta especie y la alta capacidad de proliferación y reproducción de las hembras, que se «clonan» a sí mismas dando lugar a hijas genéticamente idénticas, otorgan a este insecto un alto potencial invasor porque un único ejemplar puede dar lugar a un gran contingente de invasores en poco tiempo.
La rápida invasión de la avispilla del castaño implica un considerable daño económico y ecológico el sector europeo del castaño.
Ante esta circunstancia, para el investigador de la UEX, «la prevención es la mejor baza» de la que se dispone, si se tiene en cuenta que la avispilla se propaga de una zona a otra a través de los injertos.
La presencia de este insecto en el árbol provoca que éste tenga menos hojas y flores, lo que hace que la producción de castañas descienda hasta un 80 por ciento