Ginés Mena / Efeagro
La semana cierra con menos transacciones en el mercado y con nuevos correctivos en los precios en origen del aceite de oliva, que se distancia de la barrera psicológica de los tres euros por kilo para sus categorías de mayor calidad mientras que los lampantes apenas rebasan los 2,5 euros.
Las últimas lluvias, que permiten mejorar la situación de los olivos tras la pertinaz sequía, y las fuertes importaciones, unidas a la caída de la demanda -sobre todo interna, en beneficio del girasol– explican en buena parte que los precios se hayan ido, progresivamente, desinflando durante los últimos meses.
El POOLred muestra del 21 al 27 de abril unas 43 operaciones de compraventa entre almazaras y entidades comercializadoras por 2.835,98 toneladas a un precio medio de 2,76 euros por kilo. Por categorías, el virgen extra ronda los 2,94 euros/kg; el virgen 2,56 y el lampante 2,54 euros, detalla la misma fuente.
Mientras tanto, los datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente -del 16 al 22 de abril- reflejan valores para el aceite de orujo de oliva refinado de 205 euros/100 kilos y sobre 72-74 euros/100 kg para el de girasol refinado.
Buena parte de los envasadores se han provisto hasta la fecha de aceite de oliva de importación, como muestran las estadísticas, 90.000 toneladas adquiridas a otros países durante el primer semestre de la actual campaña de comercialización 2017-2018.
De acuerdo con los datos oficiales de comercio exterior (Datacomex), sólo en febrero de 2018, las importaciones superan las 17.500 toneladas a un precio medio de 3,22 euros por kilo -teniendo en cuenta todas las categorías-, procedentes en un 35 % de Portugal, el 27 % de Túnez, el 16 % de Siria y el 11 % de Turquía.
En cuanto a las exportaciones españolas para este mismo mes, ascendieron a 56.468,58 toneladas a un precio medio de 3,88 euros por kilo, aunque variable en función de la categoría: 3,99 euros/kg para el virgen extra; 3,42 el virgen y 3,57 euros por kilo para el lampante comercializado a destinos internacionales.
La cifra de exportación de febrero es la segunda más baja de la actual campaña, con el aceite de oliva virgen extra como principal referencia vendida, al acaparar casi el 60 % de las expediciones.
Las perspectivs para el próximo ejercicio son bastantes moderadas, aunque mejor que en otrs países productores
Italia absorbió el 25 % de las exportaciones de aceites de oliva durante este mes, por delante de Portugal (14 %), Francia (11 %) y EEUU (10 %); el resto de los destinos completa el 40 % restante.
En cuanto a la producción española, alcanza un total de 1.228.000 toneladas a nivel nacional en lo que va de campaña, hasta marzo, lo que supone un 4,5 % menos que en el ejercicio anterior, por debajo de la media (que ronda 1.250.000 toneladas).
Los datos provisionales de aceite de oliva de la Agencia de Información y Control Agroalimentarios (AICA) a 31 de marzo muestran, en el ecuador de la campaña de comercialización 2017-2018, que durante el último mes han salido al mercado 101.500 toneladas.
Según valoran desde Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, no es previsible que la recuperación de la normalidad en el estado hídrico del olivar repercuta excesivamente en el próximo ejercicio que, si bien apunta a ser mejor que los anteriores, «tampoco irá mucho más allá de una campaña media, ya que difícilmente los árboles van a tener tiempo de restablecerse en su totalidad».
Distinta será la situación de cosecha en el resto de los países productores, donde «es previsible que, dada su mayor vecería, registren producciones inferiores a las de este año», también en Italia, que ha sufrido este año fuertes heladas.