El sector del ovino español «está dando ejemplo» a la ganadería y a la agricultura nacional de lo que es la integración cooperativa «a pesar de que es de los sectores más pobres que hay». Así lo asegura en una entrevista con Efeagro el presidente de la Organización Interprofesional Agroalimentaria del Ovino y el Caprino (Interovic), Francisco Marcén, tras recordar que actualmente tres de las diez Entidades Asociativas Prioritarias (EAP) se dedican al sector ovino (Oviaragón, Consorcio de Promoción del Ovino y EA Group).
Para Marcén, cuando el cooperativismo alcanza un «nivel fuerte» de integración «todo el sector» acaba beneficiándose, por lo que valora estos ejemplos de asociacionismo y anima a seguir en esta senda.
Otra de las tendencias actuales, además de la integración cooperativa, es la creación de macrogranjas, aunque Marcén apunta que en este caso el ovino, principalmente el de carne, queda fuera: «Ha crecido el tamaño de las explotaciones pero las macrogranjas no es el modelo del ovino ya que éste exige pastoreo» para ser rentable.
Es más, advierte: «Que nadie piense en estabular una granja de ovino de carne porque se va a arruinar» y asegura a continuación que ha visto «varios casos» de cierre de explotaciones basadas en la estabulación porque no eran rentables, al incrementarse los costes respecto al ovino tradicional en extensivo.
Interovic se ha marcado la fecha del año 2020 para intentar entrar en el gigante asiático, aunque asume es «complicado»
Según Marcén, el ovino de carne se encuentra «en una crisis estructural» en la que convergen la falta de relevo generacional y la de rentabilidad, y en mayor medida aún desde el desacoplamiento de las ayudas de la PAC (ayudas no vinculadas al número de cabezas de ganado, sino al terreno).
No obstante, es optimista de cara a la próxima reforma, en 2020, porque aventura que habrá más ayudas vinculadas a producciones ecológicas y ambientales y ahí la ganadería extensiva y de pastoreo, como el ovino, es «imprescindible».
La exportación es uno de los temas a los que la interprofesional presta atención por la demanda creciente de animales vivos desde países musulmanes.
Marcén incide en que Libia es, con diferencia, el principal destino para la exportación de cordero vivo hasta el punto de que considera «excesiva» la dependencia de ese mercado, por lo que cree que sería «bueno» abrir nuevos destinos.
Las ventas de carne también están avanzando hacía países y zonas de Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí, Honk Kong o Israel, destinos en los que ya se están haciendo campañas de promoción.
En China, según Marcén, es «complicado» entrar con carne de cordero porque tiene acuerdos de comercio a arancel muy reducido o cero con Nueva Zelanda y Australia, pero ve oportunidad para enviar casquería y producto gourmet que actualmente se está vendiendo bien en Hong Kong.
De momento, Interovic se ha marcado la fecha del año 2020 para intentar entrar en el gigante asiático.
Le preocupa el problema de los ataques de los lobos y ve necesario concienciar a la sociedad del «daño» que provoca
Entre los asuntos que influyen en el sector y que se encuentran de actualidad, destaca también el de los ataques de lobos al ganado ovino, especialmente intensos en el oeste y noroeste peninsular.
Asegura que están «muy preocupados» por este asunto porque «hace muchísimo daño» al ganado y ve «muy difícil» conseguir una postura «equilibrada» con los defensores del lobo.
Cree que es necesario concienciar a la sociedad del «daño» que provoca el lobo al ganado para que así «apoye» las medidas necesarias para «limitar» su presencia.
Según el último informe anual del ovino en España publicado por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama) -correspondiente a 2016-, el sector ovino/caprino representa el 2,4 % de la Producción Final Agraria y el 6,8 de la Producción Final Ganadera.
España cuenta con un censo total de 15,9 millones de cabezas de ganado ovino (datos 2016), lo que la sitúa como la segunda potencia europea del sector, tras Reino Unido, con una producción anual cercana a las 116.500 toneladas de carne.
La exportación de ovino alcanza al año las 32.500 toneladas de carne (más del 82 % es para el mercado comunitario) y los 700.000 animales vivos.