El sector de los subtropicales, en especial aguacates y mango, que concentra el grueso de su producción nacional en la comarca de la Axarquía (Málaga), ha pasado su primer mes de restricciones de agua para el regadío por la sequía que afecta a esta zona y mira con preocupación la próxima primavera.
La que se considera despensa europea de aguacates y mangos ha visto cómo en los últimos años su principal fuente de abastecimiento hídrico, el pantano de La Viñuela, ha ido menguando.
La Junta de Andalucía prevé activar un decreto de sequía para la Axarquía y otras zonas de Málaga, pero antes de su entrada en vigor, la administración y los agricultores acordaron una reducción del 60 por ciento del suministro de agua procedente de La Viñuela, que se aplica desde el pasado 1 de diciembre.
«Ahora en invierno, podemos ir tirando con los chubascos que se produzcan, pero el problema lo podemos tener en primavera»
El resultado es que los agricultores de aguacates y mango únicamente disponen para el presente año hidrológico de diez hectómetros cúbicos del embalse, frente a los 23 del pasado, de los cuales, ya se han consumido más de la mitad, mientras que las reservas del pantano se sitúan al 22 por ciento de su capacidad, con 36 hectómetros cúbicos.
El portavoz de la Plataforma de Aguas de la Axarquía, Alejandro Clavero, ha explicado a Efe que a algunas comunidades de regantes se les ha cortado el acceso al agua tras comprobar los técnicos de la Junta en las lecturas semanales que habían rebasado su límite.
Pese a ello, ha señalado que el sector puede pasar estos meses sin apuros, ya que el mango acabó su recolección el pasado noviembre, mientras que el aguacate se encuentra en plena cosecha.
«Ahora en invierno, podemos ir tirando con los chubascos que se produzcan, pero el problema lo podemos tener a partir de la primavera y el próximo verano, cuando empiecen a aumentar las temperaturas», ha precisado.
Desde la Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja) en Málaga, su presidente, Baldomero Bellido, ha declarado que las consecuencias de la sequía, con los pantanos en niveles mínimos, se empiezan ya a notar y amenazan la producción de 2018 de aguacates y mango, por lo que ha reclamado un pacto nacional en materia de agua.