La Constitución española, o mejor sería decir el Puente de la Constitución, ha frenado la caída del precio de la almendra esta última semana… porque básicamente no ha habido cotización. Los festivos acumulados esta semana ha impedido que hubiera actividad en la Lonja de Murcia y de Albacete lo que ha frenado cualquier movimiento y, visto lo visto las últimas semanas, en especial en la de Albacete, ha permitido que no siga cayendo.
Sólo ha funcionado la Lonja de Reus, en la que no se han movido las cotizaciones en ninguna de las variedades, principalmente porque no ha habido movimiento de compradores, quizás pensando más en el Puente que en las operaciones comerciales.
Así, en Almendra en grano la Comuna cotizó a 3.95 €, la Llargueta 4.7 €, la Marcona 4.8 €, la Comuna ecológica 6.1 €, la Mollar 3.8 €, la Mallorca 3.8 €; y las Pelonas 2.8 €. En almendra cáscara blanca La Mollar se quedó en 1.03 € y la Rofes en 1.00 €.
Por cierto, que hablando de la Constitución, y en concreto del nuevo modelo de financiación que se quiere poner sobre la mesa en estos momentos, cabe destacar que el sector agrario ya empieza a reclamar su propio espacio en este debate. Así, el sindicato Unións Agrarias ha instado al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, a que no se olvide del mundo rural en la negociación del nuevo modelo de financiación autonómica. Y es que, como casi siempre ocurre, cuando se habla de dinero y de inversiones, a los políticos se les suele olvidar que existe un mundo rural abandonado y dejado de la mano de Dios, a pesar de que en el artículo 130 de la propia Carta Magna se recoge textualmente que «los poderes públicos atenderán a la modernización y desarrollo de todos los sectores económicos y, en particular, de la agricultura, de la ganadería, de la pesca y de la artesanía, a fin de equiparar el nivel de vida de todos los españoles. Con el mismo fin, se dispensará un tratamiento especial a las zonas de montaña». Quizás algunos políticos deberían leerse mejor la Constitución ante de hablar de financiación.