La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, tras una reunión mantenida por su sectorial cunícola a la que fueron invitados también miembros de las federaciones vascas y navarras de cunicultores, ha valorado de manera positiva la situación actual en la que se encuentra el sector, si bien los precios aún están por debajo de la media para lograr cubrir los costes de producción. Las esperanzas se ponen ahora en la nueva lonja de reciente creación LONCÚN.
Unión de Uniones recalca que, a pesar del precio actual, que no deja de ser coyuntural, el precio medio percibido por el cunicultor durante el año se sitúa en 1,66 €/kg, es decir, muy por debajo aún del necesario para cubrir los costes de producción, que se sitúan en torno a 1,80 €, lo cual se traduce en un goteo incesante del número de granjas que abandonan su actividad.
La nueva lonja cuenta con una amplia representación del sector productor y transformador, con la presencia de 18 mataderos representativos
Por otro lado, los productores han valorado la amplia participación conseguida en la nueva lonja de reciente creación LONCÚN, aspecto este muy importante a la hora de fijar un precio que se ajuste lo más posible a la realidad del mercado, repercutiendo positivamente en todos actores de la cadena. En la citada lonja se cuenta con una amplísima representación del sector productor y del transformador, con la presencia de 18 mataderos representativos de todo el territorio del estado y se espera que dote de mayor transparencia a todo el sector.
Unión de Uniones recuerda la grave crisis de precios que ha venido sufriendo el sector cunícola que ha provocado la desaparición del 50% de las explotaciones en los últimos diez años. En este contexto, solicita la necesidad de incluir un capítulo específico dentro de las ayudas de la PAC futura que se está empezando a vislumbrar.
El sector cunícola, a pesar de haber visto reducir su producción en un 20%, sigue siendo clave en las zonas donde tradicionalmente goza de mayor implantación, propiciando asentamiento de la población, generando empleo y riqueza, tanto por el trabajo directo en las granjas como por los servicios inherentes a las mismas (transporte, medicamentos, servicios veterinarios, piensos etc.), así como contribuyendo directamente al mantenimiento de la dieta mediterránea.