El Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama), ha aprobado, mediante un Real Decreto, prorrogar la situación de sequía declarada en la cuenca del Júcar hasta septiembre de 2018.
La aprobación de este Real Decreto permite al Mapama continuar aplicando medidas excepcionales, en colaboración con la Confederación Hidrográfica del Júcar, para paliar los efectos de la sequía durante el próximo año hidrológico, que abarca del 1 de octubre de 2017 al 1 de octubre de 2018.
Esta prórroga de la situación de sequía permite también al Mapama seguir movilizando todos los recursos disponibles, como el agua procedente de las plantas desaladoras, de los pozos de sequía ubicados en la cuenca y de las cesiones que puedan acordar los regantes para hacer frente a la escasez de agua. Esta prórroga, en todo caso, está condicionada a la evolución del Indicador de Estado del Sistema Global de la cuenca del Júcar.
PRÓRROGAS ANTERIORES
La escasez de recursos hídricos en el año hidrológico 2014/2015 en el ámbito territorial de las Confederación Hidrográfica del Júcar ya provocó que, en mayo de 2015, se aprobara un Real Decreto de Sequía, en el marco de las medidas adoptadas por el Gobierno para paliar la situación de sequía que se estaba sufriendo con especial intensidad en esta zona, con vigencia temporal hasta el 31 de diciembre de 2015. Como la situación no mejoró en esa fecha, la declaración de sequía se prorrogó hasta el 30 de septiembre de 2016.
Con posterioridad, en septiembre de 2016, se procedió nuevamente a la prórroga de la declaración de sequía hasta el 30 de septiembre de 2017 mediante otro Real Decreto.
En la Demarcación Hidrográfica del Júcar la situación de los distintos sistemas de explotación desde la declaración inicial de sequía ha sido desigual y variable.
El actual año hidrológico, 2016-2017, se caracteriza por unas precipitaciones medias registradas en lo que va de año mayores a las de los tres años anteriores, concentradas principalmente en la zona costera y en la zona sur de la demarcación. Esto ha supuesto que los sistemas donde se han concentrado mayoritariamente las lluvias (principalmente sistemas Serpis y Marinas Alta y Baja, Palancia-Los Valles y Vinalopó-Alacantí) hayan mejorado sustancialmente, saliendo de la situación de emergencia o alerta en la que se encontraban.