El campo español está en estado de alerta debido a la sequía, en un momento clave para las campañas, porque tendrá efectos inminentes en cultivos como los cereales y, si se prolonga, consecuencias que podrían ser desastrosas, según han declarado a Efeagro fuentes de las organizaciones agrarias, que reconocen que esta situación puede afectar a cientos de miles de hectáreas.
La falta de lluvias inquieta a agricultores y ganaderos de casi todo el país, según los representantes de Asaja, COAG y UPA, que sitúan la mayor preocupación en hasta siete Comunidades Autónomas.
El presidente de Asaja, Pedro Barato, ha señalado que existe «preocupación máxima» en casi todas las autonomías, como Extremadura, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Andalucía o Aragón, por la falta de precipitaciones, que ha provocado la carencia de agua en los pantanos.
Los daños afectan a los cereales y leñosos pero preocupa cómo afectará al viñedo o al olivar de secano
Barato ha advertido de los posibles efectos de la ausencia de lluvias sobre los cereales de invierno -especialmente en Castilla y León, donde se acusó mala nascencia primero y ahora se marchitan por calor- y los pastos, más aún cuando «las previsiones meteorológicas no son nada positivas».
También ha expresado su preocupación por la evolución de los cultivos leñosos y por lo que pueda pasar en las próximas semanas con el viñedo y el olivar de secano, es decir, los que no tienen acceso al regadío.
Hay una alarma especial en Castilla y León, donde la Alianza UPA-COAG ha pedido a la Junta que declare «zona catastrófica» en los lugares donde se haya perdido cosecha debido a la sequía.
UPA-COAG ha exigido a la Junta y al Gobierno la adopción «sin demora» de medidas excepcionales ante «la sequía extrema» y los daños ya «irreparables en miles de hectáreas».
El secretario general de UPA-Palencia, Domiciano Pastor, ha declarado que la producción de cereal y colza en los terrenos de secano de amplias zonas de Castilla y León se ha perdido y que, en el caso del regadío, los agricultores «han dejado de sembrar miles de hectáreas» de maíz, remolacha o alfalfa.
Se van a ver afectadas «cientos de miles de hectáreas», porque se produce en una época que ha definido como la «llave» de las campañas
«La situación es preocupante, un desastre absoluto, no se ha conocido antes un año así», según Pastor, quien ha planteado que es «el momento de que las Administraciones den respuestas», porque, a su juicio, muchos agricultores podrían tener «ingresos cero» por sus cosechas, al no haber podido sembrar.
Ha avanzado que la sequía perjudicará a «cientos de miles de hectáreas», porque se produce en una época que ha definido como la «llave» de las campañas (junto con mayo), tras citar el caso de Palencia, donde ha cifrado en 7.500 empleos los perjudicados.
UPA-COAG en Castilla y León ha aludido asimismo a problemas para la ganadería extensiva, por la falta de agua ypastos, lo que obliga a incrementar los costes de explotación.
En el sureste (Almería, Murcia o Alicante), los cultivos con amenaza «más inminente» son también los de cereales, según el presidente de COAG-Murcia, Miguel Padilla, quien ha remarcado que la coyuntura se volverá «muy crítica» para el secano si no llueve en los próximos cinco o seis días.
Si continúa la situación climática, ha apuntado Padilla, los problemas que ahora afectan al grano podrían extenderse al almendro y al olivar.
Dentro de las hortalizas, ha resaltado que también se ha producido un «colapso en el mercado» por coincidencia de productos como brócoli, debido a diferencias en un par de semanas respecto al calendario habitual, en contraste con la falta de producto de hace un par de semanas, con la consiguiente alteración comercial.