El objetivo de esta actuación es diversificar las especies en una zona donde predomina el pino y donde la densidad actual hace conveniente la repoblación. Las especies utilizadas son: Carrasca (Quercus rotundifolia), Fresno (Fraxinus ornus), Arce (Acer granatense), Durillo (Viburnum tinus), Guillomo (Amelanchier ovalis), Madreselva (Lonicera implexa), Madreselva etrusca (Lonicera etrusca), Espino albar (Crataegus monogyna), Rosal silvestre (Rosa sp).
La otra zona de actuación se centra en el entorno del Mas de Tetuán, donde se está ejecutando la recuperación de especies de árboles frutales en vías de desaparición y de elevado valor etnoagrario, favoreciendo la presencia de especies vegetales con bayas y frutos para la fauna silvestre y el mantenimiento de la estructura tradicional del paisaje agrícola.
Además, dentro del proyecto se ha realizado también el mantenimiento de puntos de agua para la reproducción de anfibios y bebederos, así como la recuperación y mantenimiento de elementos etnográficos, en concreto la reconstrucción de varios muros de piedra de antiguos abancalamientos y la recuperación del pozo que suministraba agua a los cultivos.
El proyecto se inició en el mes de febrero y, a finales de la primavera, se realizó una primera valoración positiva de los resultados de las plantaciones e injertos. Por ese motivo, se continuó con el proyecto y recuperación de otros bancales tradicionalmente agrícolas, pero que en este momento se encuentran en desuso.
En la plantación se ha utilizado el cerezo de Santa Lucía (Prunus mahaleb), el espino albar (Crataegus monogyna), el serbal común (Sorbus domestica), el Peral de Monte (Sorbus Terminalis), el manzano (Malus domestica) y el Madroño (Arbutus Unedo).