David J. García Ostos / Presidente de la Asociación para el Desarrollo Rural de Andalucía (ARA)

La provincia de Sevilla cuenta con siete Grupos de Desarrollo Rural. Uno de los primeros Grupos que comenzaron a funcionar a principios de los años 90 es la Sierra Norte de Sevilla denominada hoy Sierra Morena Sevillana

El 90% del territorio de Andalucía es rural. En nuestros pueblos viven más de cuatro millones y medio de personas que han visto cómo ha cambiado su realidad en las tres últimas décadas.

Estos hechos explican por sí mismos la importancia de lo rural en nuestra región. De ahí que nuestra Comunidad se dotara, a principios de los 90, de los Grupos de Desarrollo Rural, los mejores instrumentos para diversificar la economía y sembrar de oportunidades nuestros territorios.

En esa década también se constituía la denominada ALA, la asociación de los Grupos LEADER de Andalucía para poco después conocerse como ARA, la red de los Grupos de Desarrollo Rural de Andalucía.

 CIFRAS DEL DESARROLLO RURAL EN ANDALUCIA

En un principio, la asociación estaba formada por nueve Grupos de Desarrollo Rural que gestionaron los primeros fondos europeos LEADER que llegaron a 95 municipios andaluces.  Uno de esos primeros fue la Sierra Norte de Sevilla. Hoy, 30 años después, somos 47 Grupos presentes en 713 de los 785 municipios de Andalucía.

La provincia de Sevilla tiene 7 Grupos de Desarrollo Rural: Aljarafe-Doñana, Bajo Guadalquivir, Campiña y Los Alcores de Sevilla, Corredor de la Plata, Gran Vega de Sevilla, Serranía Suroeste Sevillana y Sierra Morena Sevillana.

En total, los Grupos atienden a 69 municipios de la provincia de Sevilla con una población de 696.144 habitantes.

A lo largo de estos años, los distintos programas de desarrollo rural han proporcionado un mejor conocimiento de las necesidades que tenían y tienen las áreas rurales y han contribuido con creces a potenciar sectores económicos que han sido clave en el desarrollo rural andaluz e incluso europeo. Me refiero al turismo rural, principalmente pero también a otros como las marcas de calidad territorial, artesanía, el comercio de proximidad, etc.

Ahora que se habla mucho de despoblación, lucha contra el cambio climática, igualdad de oportunidades y de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), LEADER ya abordaba todos estos desafíos mediante la colaboración público-privada, el enfoque participativo a través de estrategias territoriales de desarrollo; actuaciones integradas y multisectoriales diseñadas de abajo a arriba, etc. Y lo ha venido haciendo teniendo como premisas la igualdad de oportunidades, la cooperación y el trabajo en red, la innovación y el respeto por el medioambiente.

Todas estas iniciativas constituyen, sin duda, un buen motor para impulsar la economía y el desarrollo de las zonas rurales, sobre todo cuando, como es el caso, existe una organización y unos métodos de trabajo, en torno a los Grupos de Desarrollo Rural, avalados por la experiencia y la alta formación de sus trabajadores, con gran capacidad para aprovechar al máximo los recursos que proporcionan estos programas.

Más allá de los datos cuantitativos, LEADER ha facilitado la modernización de la sociedad rural, ha favorecido su diversificación productiva, la innovación y ha puesto en práctica procesos de participación de la población a través de los Grupos hasta entonces no conocidos.

La población rural tiene una enorme capacidad de hacer cosas y hacerlas bien y el mejor ejemplo de cómo desarrollar proyectos exitosos para que el mundo rural siga vivo está en LEADER. Pero, hay algo más que tiene un extraordinario valor y es que LEADER ha dado confianza y ha incrementado la autoestima de la población rural. Esa confianza también ha llegado a los emprendedores rurales porque el Grupo de Desarrollo Rural no se limita a dar una ayuda económica sino que los acompaña y asesora en todo el proceso de emprendimiento y eso no lo habían tenido antes.

En Andalucía, hay 47 Grupos de Desarrollo Rural, es decir, 47 formas diferentes de entender el desarrollo rural y una sola voz que habla por todos: ARA.

Nuestra entidad disfruta de una estabilidad institucional que le permite ser cada vez más ambiciosa en sus propuestas y proyectos para impulsar el desarrollo rural y la acción de los Grupos de Desarrollo Rural de Andalucía.

La prestación de servicios a los Grupos, la formación continuada de sus equipos técnicos, el fomento de la cooperación y trabajo en red y la promoción y difusión de los contenidos de los programas de desarrollo rural a la sociedad, en general son nuestros retos a los que hemos de seguir dando respuesta.

El próximo 16 de marzo celebraremos en Écija (Sevilla) el 30 aniversario del desarrollo rural en Andalucía. Será un buen momento para reivindicar el trabajo de LEADER y los emprendedores rurales porque de ellos depende, en gran medida, que tengamos un mundo rural vivo sustento de nuestra sociedad, en general.

Abracemos el mundo rural y sigamos generando valor rural en Sevilla y Andalucía.

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