La Comisión Europea, que ya estaba alerta ante los problemas de los limones turcos, ha informado a través del sistema RASSF – Sistema de alerta rápida para alimentos de la Unión Europea – una nueva detección de limones turcos con residuos de clorpirifos que superaban el LMR comunitario. Desde el 1 de septiembre son ya 5 los lotes de limón turco que han sido detectados y rechazados en la frontera comunitaria.
Sin duda se trata de un grave problema en Turquía, cuyos productores y exportadores no son capaces de ofercer las garantías sanitarias que la legislación y mercado europeo exijen, según señala la Interprofesional del Limón y el Pomelo, AILIMPO.
Estas 5 alertas sanitarias notificadas en la base de datos europea RASFF en apenas 6 semanas de campaña confirman las deficiencias del sistema oficial turco de control sobre la comercialización y uso de productos fitosanitarios, y ofrecen una información clave para las cadenas de distribución y para los consumidores europeos, al destacar los problemas de los limones turcos para cumplir los estándares de seguridad alimentaria de la UE.
Desde AILIMPO se destaca que “se valora de forma positiva el funcionamiento de los controles comunitarios, pero el hecho de que cada semana nos encontremos con una notificación de alerta sanitaria en limones turcos procedentes de ese país debe tenerse en cuenta por las cadenas de supermercados y clientes europeos que deben considerar al limón turco como un producto de riesgo”.
Asimismo, desde AILIMPO se reclama la Comisión incrementar los controles y se recuerda a las cadenas de supermercados y clientes europeos que los limones turcos no cumplen las normas europeas en materia de seguridad alimentaria.
Recientemente, eurodiputados del PP han pedido a la Comisión Europea (CE) que tome medidas para controlar la llegada al mercado comunitario de limones procedentes de Turquía con restos de pesticidas, ya que estos limones turcos suponen “una amenaza evidente para la salud de los consumidores”.