Desde la Dirección General de la Producción Agrícola y Ganadera de la Junta de Andalucía se está comenzado a denunciar los primeros casos detectados de quemas ilegales de rastrojos gracias a las imágenes captadas por los satélites SENTINEL 2 para la teledetección, advirtiendo a los agricultores de que pueden perder parte de sus derechos de la PAC por estas practicas.
En concreto, la Junta de Andalucía está realizando una experiencia piloto para esta detección de las quemas ilegales de rastrojos, prohibidas en base a lo establecido en el Anexo I b) Buenas Condiciones Agrarias y Medioambientales de la tierra 6 (BCAM 6) de la Orden de 12 de junio de 2015, por la que se establecen las normas de la condicionalidad aplicables en Andalucía.
La experiencia piloto consiste básicamente en la utilización de imágenes captadas por los satélites SENTINEL 2 para la teledetección, aplicándolo en este caso a la quema de rastrojos. Estos satélites proporcionan imágenes periódicas de cada recinto SIGPAC analizado.
En el curso de esta experiencia, la Junta está enviando cartas a los agricultores en los que se le advierte de se han detectado indicios de estas quemas ilegales de rastrojos en alguno de los recintos declarados por ellos en la Solicitud Única correspondiente al año 2017.
En la misiva, también se detalla que en base a lo establecido en el Artículo 4 de la mencionada Orden, los órganos que asuman competencias relativas a la Condicionalidad informarán y orientarán a las personas beneficiarias de las ayudas acerca de las actuaciones que deben llevar cabo para respetarla.
Finalmente, se informa de esta incidencia y se le recuerda que la quema de rastrojos no autorizada supondrá una reducción mínima del 1% en el porcentaje de ayudas percibidas de la PAC, pudiéndose incrementar este porcentaje por distintas circunstancias si mantiene este tipo de prácticas.
Tambien, deberian servir para detectar los vertidos ilegales de aguas residuales.
Por ejemplo.
Seria interesante que el saletite captara la imagen de los pirómanos de todo tipo, que incendian cosechas y dehesas