Cooperativas Agro-alimentarias de España ha elaborado la previsión para la cosecha de fruta de hueso en España en 2018 y apunta a que la producción alcanzará las 1.800.000 toneladas, es decir, un 9% menos respecto al año pasado y un incremento del 9% respecto a la media de las últimas cinco campañas.
Por categorías, la nectarina sigue siendo la fruta que supone un mayor volumen, con una estimación de 596.735 t. (-13% en relación con 2017), seguida del paraguayo con 325.904 t. (- 9%), muy cerca del melocotón y la pavía, grupos para los que se espera 314.685 t. (-11%) y 304.673 t. (+2%), respectivamente. La ciruela sufre la caída de producción más importante, con 118.003 t. (-21%) mientras que la producción de albaricoque es la única que crece significativamente hasta las 142.709 t. (+9%).
Marcada por las condiciones climáticas y accidentes meteorológicos
Estos son los datos que Cooperativas Agro-alimentarias de España presentó el pasado 9 de mayo, en los dos encuentros celebrados en Rimini (Italia): primero en la reunión del Grupo de Contacto de Melocotón, Nectarina y Albaricoque del Comité Mixto Hispano-Italo-Francés, y a continuación en el Foro convocado por el sector italiano (“Fórum de peschicoltura europea”). En este foro, organizado en el marco de la feria Macfrut, los expertos compartieron información y analizaron las previsiones de los distintos países productores de la UE, el comportamiento del mercado en el inicio de la campaña y las tendencias generales del sector a nivel de la producción, del consumo y la comercialización.
Si el año pasado la producción fue récord, alcanzándose su máximo potencial productivo en España, este año la campaña se prevé que será menor y quedará marcada por las condiciones climáticas y accidentes meteorológicos que se han sucedido desde principios del año.
Por una parte, las horas de frío han sido propicias para un desarrollo vegetativo adecuado, y por lo tanto se espera una fruta de calidad. No obstante, a causa de los episodios de heladas y granizo de febrero y marzo, y del pedrisco y las abundantes lluvias de las últimas semanas registradas en varias zonas productoras, se prevé una merma de la producción del 9% respecto a 2017 – que será más acentuada en la primera parte de la campaña- y se está confirmando un retraso de entre 2 y 3 semanas respecto a la campaña anterior.
En cuanto al comportamiento del mercado, Javier Basols, presidente del Grupo de Trabajo de Fruta de Hueso de Cooperativas Agro-alimentarias de España, ha manifestado su confianza en que la salida de la fruta de las distintas regiones se produzca siguiendo un correcto escalonamiento y que la climatología en los principales focos de consumo en Europa alcance pronto y sostenidamente temperaturas estivales, favorables al consumo.
ESPAÑA SUPERARÍA A ITALIA EN PRODUCCIÓN
En el capítulo dedicado a la reflexión sobre las “estrategias de futuro” del sector, el representante de las cooperativas se ha referido al gran reto que debería afrontar coordinadamente el sector en España acompañado por la administración: un ajuste estructural del sector con el objetivo de recuperar la rentabilidad para el agricultor. Para ello, Basols apunta la necesidad de recuperar el equilibrio oferta demanda, la oportunidad de recuperar el consumo interior a través de la promoción y de mejorar la concentración de la oferta y la comercialización en este sector.
España (con 1.541.997 toneladas) previsiblemente superaría en producción a Italia, que estima una disminución general de la producción en todas las variedades y en todas las zonas a causa de las heladas acaecidas entre finales de febrero y principios de marzo, y al arranque de plantaciones en la zona norte.
Francia experimentaría una caída del 9,5%, situándose en 200.166 t., a causa de las mermas en la producción por incidencias climáticas, pero también al descenso de la superficie por problemas sanitarios o económicos.
Cabe destacar el importante repunte de la producción en Grecia, que ha anunciado un incremento de su producción hasta las 810.000 t. (un 19% más que en 2017), principalmente debido al incremento de la producción del melocotón amarillo.