ASAJA Almería ha manifestado su preocupación por las negociaciones de Mercosur y lo que la apertura de las fronteras europeas puede suponer para productores de melón o sandía por el potencial que mantienen países de esta región como Brasil.
Igualmente, la organización ha criticado el oscurantismo que rodea a estas negociaciones que no tienen contento prácticamente a nadie del sector productor europeo y que tendrán que finalizar el próximo día 2 de marzo y que costaría cerca de 7.000 millones de euros para el sector agrario europeo, como ha denunciado el Copa-Cogeca.
ASAJA destaca que países de Mercosur como Brasil presentan una importante tendencia de crecimiento en la producción de melón y ya es el cuarto productor mundial de sandía, lo cual, en opinión de la OPA, hay que tener en cuenta a la hora de prever el futuro de estos productos.
«Cuando llegamos al mercado europeo éste ya está invadido por producciones extracomunitarias»
En este sentido, la organización agraria recuerda que España es el principal proveedor de melón a la Unión Europea, la campaña pasada se exportaron algo más de 232.000 toneladas, seguida muy de cerca por Brasil que ocupa el segundo lugar con más de 225.000 toneladas, siendo además los primeros en llegar al mercado ya que lo hacen durante el invierno y primavera temprana junto a otros competidores africanos como son Marruecos y Senegal. “Con lo cual abrir más las puertas a estos competidores no va a salirnos gratis”, se señala desde ASAJA.
En el caso de la sandía, Brasil es el cuarto productor mundial (el segundo es Turquía) y aunque en ventas a la UE no ocupa un lugar destacado (la campaña pasada introdujeron 65.352 toneladas), tiene una producción de más de dos millones de toneladas, lo que lo convierte en un potencial proveedor.
Ante el escenario que dejaría el acuerdo de Mercosur, ASAJA-Almería muestra, además, su preocupación por la tendencia a la baja que están registrando las tradicionales producciones de primavera, ya que se está reduciendo la apuesta del agricultor almeriense por el melón, algo que podría trasladarse en un futuro a la sandía, a pesar de que las previsiones expresadas desde la Delegación de agricultura hablan de un incremento en la superficie para esta fruta veraniega.
La organización explica que la provincia exportó un 18% menos de melón la campaña pasada por el que también obtuvo un menor valor en esas ventas y por supuesto para el agricultor. “Melón y sandía que habitualmente han supuesto un desahogo al agricultor almeriense en los últimos años están siendo cada vez menos rentables, ya que cuando llegamos al mercado europeo éste ya se encuentra invadido por producciones extracomunitarias, quedando para nosotros el hueco que dejan que a veces no permite alcanzar unos precios dignos y acordes con la calidad que ofrecemos”, señala Francisco Vargas, Presidente Provincial.
las importaciones procedentes de África son cada vez más numerosas
ASAJA Almería expone, además, que la importación de productos de MERCOSUR la realizan grandes empresas de importación cuyo objetivo es aumentar los márgenes, que ya son muy amplios, a la par que proveerse de producto barato para el agricultor para renunciar a las producciones europeas que ostentan mayor calidad y donde los agricultores no están dispuestos a regalar su producto.
Por otro lado, la organización señala que las importaciones procedentes de África son cada vez más numerosas, lo que ha hecho que incluso marcas que nacieron en la provincia produzcan en estas áreas, introduciendo en el mercado los productos en el momento en que aún no hay producción, por lo que si no obtienen una calidad adecuada puede traer perjuicios a las producciones almerienses al ser rechazadas por los consumidores o si no tuvieran la aceptación que debieran.
«Insistimos en la amenaza que para nuestras producciones supone la llegada de un mayor número de producciones de Países Terceros, que no cuentan con el mismo celo de autoridades y de la gran distribución a la hora de exigir los mismos requisitos que a las producciones nacionales a las que presionan para producir bueno, bonito y sobre todo barato, muy barato», concluye la organización.