La Asociación Profesional de Apicultores Extremeños (Apaex) ha lamentado que la producción de miel de primavera vaya a ser inferior a un año normal por las bajas temperaturas desde mayo hasta hoy y que la campaña de polen haya sido «la de menor producción en los últimos diez años».
En un comunicado, ha explicado que tras un período de fuerte sequía hasta el mes de febrero, el inicio de un período muy lluvioso y continuo durante marzo y parte de abril crearon «grandes expectativas» en el sector apícola extremeño, que finalmente «se han visto lastradas por la falta de calor».
Ha precisado que la reposición de enjambres ha sido lo más positivo de la presente campaña apícola, ya que ha permitido cubrir la elevada mortandad de colmenas sufrida durante el invierno que fue superior al 50 % de la cabaña.
La falta de calor y días soleados ha dificultado la polinización
Para Apaex, si algo ha caracterizado la campaña apícola durante la primavera han sido las bajas temperaturas que las sucesivas bolsas de frío han traído a la región, «imposibilitando la continuidad de días más soleados para que las abejas melíferas (pecoreas) pudieran realizar su trabajo de polinización en las mejores condiciones posibles».
Esta situación, de falta de calor, unido a la desigual y escasa lluvia de finales de abril y de todo el mes de mayo, han provocado «un efecto negativo en la recolección de la miel de primavera que será bastante inferior a la esperada», ha advertido.
En cuanto a la producción de polen, el resultado de campaña es «aún más negativo», porque será «la menor de los últimos diez años», teniendo en cuenta que el principal arbusto del que obtienen las abejas melíferas el polen es la jara (Cistus).
Los apicultores se enfrentan cada año a dificultades climatológicas cada vez más determinantes
Su floración natural, según Apaex, se ha retrasado de media más de 20 días en toda la región extremeña por la sequía padecida hasta febrero y por las continuas lluvias hasta bien entrado abril, lo que ha provocado que las abejas pecoreas eligiesen otro tipo de plantas o flores del suelo como principal recurso proteínico y alimenticio para la cría.
El presidente de la asociación, Ventura Gil Redondo, ha recalcado que los apicultores se enfrentan cada año a condiciones climatológicas que son «cada vez más determinantes en la producción y en la rentabilidad» de las explotaciones apícolas.
Esto, a su juicio, crea «mucha incertidumbre» en el conjunto del sector apícola extremeño, como consecuencia del cambio climático que «ya se muestra irreversible»