UPA Madrid se ha mostrado preocupada por «el alarmante descontrol de la fauna silvestre» tras analizar los últimos datos de ataques del lobo al ganado. Según un informe de la Comunidad de Madrid al que ha tenido acceso esta organización, el número de ataques anuales ha pasado de 15 a 251 en tan sólo tres años. Para la organización de agricultores y ganaderos, estos datos demuestran que «el lobo ha vuelto con fuerza a Madrid y somos los ganaderos los que le estamos dando de comer, cuando somos nosotros los que estamos en peligro de extinción».
Tras solicitar un informe sobre ataques del lobo al ganado a la Consejería de Medio Ambiente, Administración Local y Ordenación del Territorio de Madrid, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Madrid ha mostrado su preocupación por los “alarmantes datos que revelan que esta especie ha vuelto con fuerza a la Comunidad de Madrid”.
El documento de la consejería recoge los datos pertenecientes al periodo entre enero de 2012 y noviembre de 2016, y demuestra un “dramático” aumento de los ataques de este animal, así como un incremento de los ataques a ganado cada vez de mayor tamaño y la expansión geográfica del lobo. Entre el período 2013 y 2016, el número de ataques aumentó de 15 a 251, lo que supone un incremento del 1.573,33% en tan solo tres años.
“Quienes abogan por que el lobo campe a sus anchas sin control caen en pura demagogia de urbanita”
“No se pueden ignorar los problemas que nos causa el lobo, sobre todo a las personas que vivimos en el medio rural, y muy especialmente a los ganaderos”, han señalado desde UPA. El lobo es un gran depredador, y como tal no nos podemos permitir que su población esté descontrolada. “Quienes abogan por que el lobo campe a sus anchas sin control caen en pura demagogia de urbanita”, han explicado.
Los datos demuestran que los ataques del lobo matan cada vez a animales de mayor tamaño. Mientras que en el año 2013 más del 94% de sus capturas eran ovejas y cabras, en el año 2015 las muertes eran de ganado ovino y caprino suponían cerca del 85%, siendo de vacas el porcentaje restante de muertes. Por último, en el año 2016, sólo el 66,5% de los animales matados fueron ovejas y cabras y, además, los lobos empezaron a atreverse con el ganado equino.
Además del aumento del número de ataques y de animales muertos, a UPA Madrid también le preocupa la expansión geográfica del lobo. “El lobo está conquistando territorio a gran velocidad”, han dicho desde la organización agraria, y han aportado el nombre de los municipios afectados durante 2016: Alameda del Valle, Aoslos, Braojos; Buitrago de Lozoya, Canencia, Cercedilla, Collado Mediano, Garganta, Gargantilla, Gascones, Guadarrama, Hocajuelo, La Acebeda, La Serna del Monte, Los Molinos, Lozoya, Lozoyuela , Montejo de la Sierra; Moralzarzal, Navarredonda, San Mames, Navas del Marqués, Paredes de Buitrago, Pradena del Rincón, Puebla de la Sierra, Puentes Viejas, Rascafría, Robledondo, Robregordo, Santa María de la Alameda, Somosierra, Villanueva de Lozoya y Villavieja. UPA Madrid ha recordado que esto contrasta los únicos cinco municipios que registraron ataques en 2013.
La ganadería extensiva es un sector económico de gran importancia para estos municipios, han explicado desde UPA, y su convivencia con la fauna salvaje –no sólo con el lobo- debe ser abordada como un problema social de primer orden, desde un punto de vista global, considerando los beneficios que aporta a la sociedad en materias como la vertebración del territorio, la prevención de incendios y la lucha contra el cambio climático.
“Los ganaderos en Madrid estamos en claro peligro de extinción”, han señalado desde UPA, “y debemos ser protegidos porque cada vez nos acorralan más”.