Un agricultor de la provincia de Burgos ha sido condenado a seis mes de cárcel por falsificar la identidad de 8.470 kgs. de trigo al declarar en los documentos oficiales de acondicionamiento que se trataba de la variedad vegetal de trigo “Marius”, no protegida, cuando en realidad el grano era “Craklin”, una variedad protegida de trigo blando. De esta forma intentó evitar el pago por el reempleo de grano de una variedad vegetal protegida al que obliga la normativa vigente.
El Juzgado de lo Penal núm. 3 de Burgos ha dictado con fecha 25 de mayo de 2017 un auto por el que declara firme la sentencia que condenó a este agricultor el pasado mes de marzo, quien al intentar falsear la identidad de la variedad vegetal acondicionada para siembra, fue considerado por el juez autor de un delito contra la propiedad industrial tipificado en el artículo 274.3 del Código Penal.
La citada sentencia, contra la que ya no cabe recurso alguno, condena a dicho agricultor a una pena de prisión de seis meses, inhabilitación especial para el derecho al sufragio pasivo, multa, pago de indemnización por los daños y perjuicios causados y de las costas procesales.
Antonio Villarroel, máximo responsable de Geslive, ha señalado que la falsificación de la identidad de las variedades vegetales que se acondicionan para siembra tiene “graves consecuencias” para los obtentores de nuevas variedades vegetales, a los que se les está causando pérdidas millonarias cada año, y también para todo el conjunto del sector.
“Este fraude masivo –ha precisado– constituye una grave competencia desleal no solo para los productores de semilla autorizados sino también para los agricultores que abonan debidamente las retribuciones por el reempleo de grano”. Por eso el Código Penal tipifica este delito con penas de hasta tres años de prisión.